Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizCádiz
Berlusconi sobrevuela la zona afectada por el terremoto. / AFP | Vídeo: Atlas
EL NÚMERO DE fallecidos PUEDE INCREMENTARSE

Berlusconi cifra en 70 los muertos y 1.500 los heridos por el terremoto

El seísmo, de 5,8 grados en la escala Richter, ha tenido como epicentro la localidad de L'Aquila, a cien kilómetros de Roma

ÍÑIGO DOMÍNGUEZ / AGENCIAS | L'AQUILA
/ ROMAActualizado:

Mañana fría y aterradora en L'Aquila. "El centro histórico tiene una imagen fantasmal". Ésa es la impresión de Íñigo Domínguez, corresponsal de EL CORREO, a su llegada a la zona más afectada por el terremoto de 5,8 grados -considerado moderado- en la escala Richter, que ha sacudido esta pasada madrugada al centro de Italia y que de momento deja la cifra de un casi un centenar de muertos, 1.500 heridos y decenas de desaparecidos, según los datos oficiales de Protección Civil.

Cascotes y cristales en el suelo, edificios dañados, afectados con maletas en los alrededores de la ciudad, autopistas cortadas, gente resguardada en los coches, tuberías rotas, excavadoras quitando escombros... Ésa es la estampa en L'Aquila, el epicentro del terremoto, a primera hora de la mañana. Desorientación, en definitiva, pese a que los servicios de emergencia trabajan sin descanso. Mientras tanto, continúa el baile de números a la hora de hablar de víctimas.

Según los últimos datos, ofrecidos este mediodía por el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, habría setenta muertos (aunque la prensa local habla de 92) y más de 1.500 heridos. Se confirman así los temores de por la mañana, cuando ya se avisaba de que el número de cadáveres iría subiendo conforme avanzaran las tareas de desescombro y rescate. Berlusconi también ha aclarado durante la rueda de prensa que por el momento son pocos los datos precisos que se conocen de la tragedia. Apenas se sabe que el seísmo se registró a la una y media de la madrugada, que su epicentro se registró en L'Aquila, localidad a cien kilómetros de Roma, que alcanzó los 5,8 grados de magnitud en la escala de Richter y que los servicios de emergencia reaccionaron "un cuarto de hora después" del temblor.

La comparecencia del primer ministro italiano se ha producido después de que sobrevolara la zona afectada en helicóptero. Un viaje por el inifierno que ha sevido para que el líder italiano aclare que ya han llegado equipos de emergencia a todos los lugares perjudicados. "No hay ningún punto afectado donde no haya medios de socorro. No se ha dejado a nadie solo y esto es fundamental. La primera emergencia es sacar fuera a quien se ha quedado bajo los escombros", ha explicado

Berlusconi también ha aprovechado el momento para salir al paso de algunas voces críticas que apuntaban a que la tragedía podía haberse evitado atendindo a las informaciones que hablaban de que en las últimas semanas se han registrado movimientos sísmicos menores. "No existen datos científicos para prevenir los terremotos", ha sentenciado el primer ministro italiano. No obstante, lo que sí se ha hecho ya es reunir a la comisión italian de Grandes Riesgos, de la que forman parte los mayores expertos de ingeniería sísmica del país para "resolver la situación y pensar en cómo prevenir".

A esto, hay que sumar la convocatoria de un Consejo de Ministros extraordinario a las 17.00 horas con el fin de que destine fondos económicos para la recuperación de la zona afectada. Un área que tal y como ha podido ver el propio Berlusconi ha quedado devastada por la fuerza del seísmo y que ha "derrumbado" multitud de edificios "sobre todo constucciones muy viejas", ha descrito el jefe de Gobierno italiano.

Tareas de rescate

El ministro del Interior, Roberto Maroni, ha asegurado que ahora lo más urgente es buscar bajo los escombros de los edificios derrumbados, una labor para la que se ha movilizado aunos 1.500 bomberos, cien policías y otros tantos "carabinieri" (policía militarizada). Según el canal de noticias de la televisión pública, RAI, se teme que hayan unas cien mil personas evacuadas tras el terremoto de gran magnitud de la pasada madrugada, que tuvo después algunas réplicas menores.

Por su parte, el ministro de Sanidad, Maurizio Sacconi, al término de la reunión de la unidad de crisis establecida tras el terremoto, lanzó un llamamiento para que se done sangre. "Estamos movilizados las veinticuatro horas del día en estrecha coordinación con Protección Civil, como debe ser. Nuestra labor es verificar si el Servicio Sanitario Nacional es cuanto menos capaz de ofrecer soluciones", dijo Sacconi en declaraciones que recogen hoy los medios locales..

Centenares de heridos

Según los datos ofrecidos por la Protección Civil italiana, el temblor se produjo alrededor de las 3.35 hora local con epicentro a cinco kilómetros de profundidad. La zona más afectada fue la de L'Aquila -de unos 70.000 habitantes-, en la región del Abruzzo y a unos 100 kilómetros al norte de Roma, donde numerosos edificios -Protección Civil habla de 10.000 a 15.000- se derribaron, entre ellos la cúpula de la iglesia de las Almas Santas, en el centro histórico. La catedral también sufrió daños estructurales. Otras poblaciones cercanas como Villa Sant'Angelo, Paganica, San Demetrio, Onna Fossa y Poggio Picenze también sufren las consecuencias del terremoto.

Según las estimaciones de la Protección Civil, la cifra de heridos asciende a primera hora de la tarde a 1.500, que se acumulan en los hospitales de la zona para ser atendidos. En el centro hospitalario de la localidad sólo hay un quirófano, por lo que se ha tenido que levantar un hospital de campaña para hacer frente a todos los pacientes que necesitan atención, muchos de los cuales están siendo tratados a las puertas del centrol, dado que no queda espacio en el interior. Además, los más graves han tenido que ser trasladados en helicópteros a otros lugares.

El temblor también fue percibido por habitantes de la capital italiana, muchos de los cuales llamaron alarmados a los servicios de emergencia para saber si tenían que tomar medidas de precaución. Sobre las 9.00 horas todavía se produjeron réplicas del seísmo, que han llegado a alcanzar los 3,8 grados, según ha podido sentir el periodista de EL CORREO.

La población se ha concentrado en las plazas de la ciudad, asustada por el suceso. En muchas de ellas, Protección Civil ha instalado tiendas, donde se han reunido a los afectados. Gente impedida ha sido trasladada hasta estos lugares, donde se les facilita agua. Alrededor de 15.000 usuarios quedaron en un primer momento sin electricidad en Abruzzo, de los que un 80% ya han recuperado el suministro. Los bomberos de la zona, mientras tanto, se hallan inmersos en las tareas de rescate para sacar a las personas que habrían quedado atrapadas en los escombros de los edificios derrumbados, entre los que figura un alojamiento para estudiantes en el que también podrían haberse registrado víctimas.

Estado de emergencia nacional

El primer ministro, Silvio Berlusconi, ha dictado un decreto de emergencia nacional. Berlusconi, quien tenía previsto viajar hoy mismo a Moscú, ha anulado finalmente su visita oficial a la capital rusa y se ha desplazado a L'Aquila para conocer en primera persona los daños causados. El líder italiano ha asegurado en declaraciones a la cadena de televisión Sky TV que se trata de "una situación sin precedentes" en esta década.

El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha ofrecido hoy al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, toda la colaboración que necesite. Zapatero, quien ha expresado su solidaridad y sus condolencias por las víctimas, ha enviado un mensaje al primer ministro italiano para interesarse por la situación y tiene intención de hablar con él lo antes posible, según han apuntado fuentes del Ejecutivo español. Por su parte, los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama, y de Rusia, Dimitri Medvédev, también se han puesto en contacto con Berlusconi para trasladarle su pesar y solidaridad en estos momentos.

Italia es un país de gran actividad sísmica. Los medios italianos informan de que con anterioridad al terremoto se produjeron movimientos sísmicos más débiles en la misma zona, al noreste de la capital italiana y cerca también de la ciudad de Pescara. Concretamente en Forli, a las 22.40 horas, se dejó sentir un terremoto de menor intensidad. Hace menos de una semana el director de Protección Civil, Guido Bertolasso, se reunió en L'Aquila con diferentes autoridades para establecer un protocolo de actuación ante la posibilidad de un terremoto. Desde octubre la zona viene padeciendo un número importante de sacudidas.