Triunfal vuelta al liderato
El Xerez regresa a lo más alto de la tabla tras imponerse en la Nueva Condomina Los de Esteban Vigo sólo sufrieron en los últimos diez minutos de partido
| ENVIADO ESPECIAL. MURCIA Actualizado: GuardarEl Xerez vuelve a mirar a todos sus rivales desde lo más alto de la tabla de clasificación de la Liga Adelante Segunda División. Tras padecer una semana en la que se derrochaba derrotismo, y tener que soportar los comentarios de adversarios directos que ya daban a los azulinos por muertos, el Xerez Club Deportivo vuelve a adivinar la Primera División desde el pico más alto de Segunda, pues se encuentra aproximadamente a cinco victorias de alcanzar el sueño.
Los últimos siete días de pesimismo dejarán paso ahora a otros tantos de optimismo durante la semana previa al duelo contra el Hércules. Pero antes del enfrentamiento contra los alicantinos se disfrutará del triunfal regreso al liderato tras una victoria trabajada con un final sufrido.
Esteban cumplía con el guión y saltaba a la Nueva Condomina con novedades en el once titular. Más variantes de las esperadas incluso, pues dio entrada a Martí Crespí en el lugar de Silva. La vuelta del central cedido por el Mallorca fue la sorpresa de la alineación, ya que Martí acumulaba un mes sin tan siquiera entrar en las listas de convocados, pero fue la primera medida tomada por el técnico del Xerez para tratar de recuperar la solidez defensiva perdida por los azulinos. La segunda medida apuntó al centro del campo, donde confeccionó un triángulo formado por Vicente Moreno, Álex Bergantiños y Abel Gómez. Los centrocampistas se colocaron apuntado a Chema, de manera que Moreno estaba sólo unos metros por delante de la pareja de centrales y Álex Bergantiños y Abel, emparejados en la zona ancha.
El preparador malagueño también tenía que solucionar las bajas en las bandas, y Carlos Calvos y Asier fueron las contramedidas elegidas para arreglar las ausencias de Pedro Ríos y Momo. A lo largo de la semana, Esteban había barajado la opción de adelantar a Francis e introducir en la línea defensiva a Juan Luis Redondo, pero el sevillano tuvo que comenzar el partido desde el banquillo junto a suplentes de lujo como Antoñito, Brian Sarmiento, Míchel o Silva.
Estos hombres dibujaron sobre el prado murciano un Xerez con talante defensivo, con la clara idea de no encajar ningún tanto, pero a la vez era organizado, muy atento a las marcas, a los movimientos propios y a los de los rivales. Los centrocampistas estaban muy pendientes de la presión, robo y salida por banda. Bergantiños era el que tapaba y Abel el que miraba rápidamente a Calvo o Asier. Calle, muy solitario en punta, hacía lo que podía y buscaba sin demasiado éxito los pases desde los carriles.
El primero de los acercamientos azulinos se produjo antes del minuto diez con un tímido remate de cabeza de Abel, que ni tan siquiera vio puerta. El ex grana volvería a aparecer sólo tres minutos más tarde para poner en movimiento una falta lateral. El sevillano la colocó entre el punto de penalti y el área chica, donde Martí Crespí sólo tuvo que poner la cabeza. A la falta de espacio y tiempo se sumó la lentitud del uruguayo Carini, que nada hizo para impedir que el tanto subiera al marcador.
Las dudas generadas por el portero uruguayo terminaron de confirmarse tras un fuerte, pero lejano, disparo de Antonio Calle, que Carini a duras penas mandó a córner.
La respuesta del Murcia durante la primera parte prácticamente no existió. Su ocasión más peligrosa se la deben a Chema, pues el de Orihuela no fue capaz de blocar un pase interior de Bruno. El portero xerecista estuvo atento en la salida, pero nefasto en el blocaje, pues se le escurrió un esférico que apunto estuvo de acabar en la portería del Deportivo. Las ansias de los delanteros del conjunto murciano se tradujeron en un claro fuera de juego que desmoronó el peligro.
Los azulinos sí contaron con otra más antes del descanso. La ocasión cayó en las botas de un Abel que no supo definir tras una buena triangulación de Bergantiños y Calle por la banda derecha. El sevillano recibió un pase al pie en el punto de penalti, pero su remate fue directo a las manos de Carini.
Amago de reacción
Tras el descanso, el conjunto grana inició una tímida reacción con un disparo de De Lucas que se marchó por la línea de fondo, cuando tenía tiempo y espacio para, al menos, darle trabajo a Chema. Ese amago de reacción se quedó en el intento, principalmente, por el mazazo que supuso el segundo tanto del Xerez. El Deportivo volvía a pegar en el minuto once, también con una jugada a balón parado, y de nuevo con la semilla puesta por Abel. El sevillano la metió en el área y el esférico fue introducido por Campos en su propia portería. Al 0-2 hay que sumarle la expulsión casi seguida de Capdevila, que vio la segunda amarilla por un codazo a Antonio Calle, para dar explicación al tiempo muerto en el que entró el encuentro al cuarto de hora de iniciarse la segunda parte. El Murcia veía demasiado empinada una cuesta que los azulinos bajaban cuesta abajo. Sólo la rigurosa expulsión de Asier, también por doble amarilla, volvió a dar vida al partido. Gallardo saltó al campo y tiró del carro grana hasta el punto de poner contra las cuerdas a los xerecistas, pues a falta de seis minutos para el final, Gallardo recortaba distancias con un buen tanto: recorté con la derecha a Redondo (que había entrado por Mendoza) y disparo con la zurda.
Esteban había desdibujado al Deportivo al quitar a Abel del campo. El sevillano estaba aguantando a su equipo y fue de los más destacados de los xerecistas, pero cuando el duelo entró en la locura, Abel se encontraba ya en el banquillo. Esos últimos diez minutos (el colegiado prolongó cinco sobre los noventa) se debatieron entre las ganas que le ponían el Murcia y las contras del Xerez, pero ni el corazón grana ni la velocidad de Brian Sarmiento hicieron variar el resultado final de un encuentro que sirvió a los xerecistas para retornar triunfalmente al liderato de Segunda División.
sgalvan@lavozdigital.es