Los centros de la Mujer asesoraron sobre violencia a casi 7.000 mujeres en 2008
Los dispositivos de atención del Instituto de la Mujer atendieron a 279 víctimas de la violencia de género, de las que 147 eran menores
| CÁDIZActualizado:El desarrollo de la Ley de Igualdad y la creación de un plan estratégico son las armas con las que el Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) quiere hacer frente a la discriminación y especialmente a la violencia de género. El departamento que dirige Dolores Virués en Cádiz se ha marcado como objetivo restar camino a las desigualdades este año con la norma legal como referente y los instrumentos de los que dispone.
Uno de los mayores avances será contar con un edificio propio para atender los problemas de las usuarias. Esta nueva sede ya funciona en la calle Isabel la Católica de la capital y se inaugurará en unos 15 días, según avanzó ayer su responsable en la presentación del balance de actividades de 2008.
Los 18 centros de la Mujer que funcionan en la provincia y el teléfono 900 recibieron un total de 20.079 consultas de mujeres durante todo el año pasado, 6.980 de ellas sobre violencia de género. En cifras más manejables, esos números quieren decir que una media de 19 usuarias al día pidieron consejo o ayuda por un problema de malos tratos.
Dispositivos
Ante esta situación y dadas las estadísticas de años anteriores, los dispositivos de atención a las víctimas se han incrementado y la provincia dispone ya de 69 plazas, repartidas entre dos centros de emergencia, una casa de acogida y dos pisos tutelados, que recibieron el año pasado a 279 personas, 147 de ellas menores.
Estos recursos suponen la atención más inmediata, que se completa con una terapia ofrecida en los propios centros o a través de colectivos. Tal es el caso de las sesiones en grupos que se realiza en colaboración con el Colegio de Psicólogos de Cádiz que crearon 28 equipos el año pasado, recalcó Virués.
La directora provincial destacó la labor que realizan los centros municipales de información, «ya que las gaditanas son las que menos recurren a la línea 900 porque prefieren ir a los puntos de información». Así, insistió en que «ninguna víctima de la violencia machista debe tomar decisiones sin estar bien informada».
Precisamente por eso, recordó los programas de inserción social y laboral que están a disposición de las usuarias, así como la subvenciones para este colectivos que el año pasado ascendieron a 92.105 euros.