Obama y sus quintosDisidentes del IRA protagonizan ataques callejeros en Belfast
El presidente de EE UU llega a Europa 'blindado' por un numeroso séquito, helicópteros y su limusina
| NUEVA YORK BELFAST CORRESPONSAL. BERLÍNActualizado:¡Que suenen las fanfarrias! El presidente de Estados Unidos Barack Obama ya está en Europa. No sabe viajar ligero y para su primer gran encuentro con los principales mandatarios europeos ha preferido hacerse eco de aquello del 'más vale que sobre, que no que falte'. Por eso, el presidente estadounidense aterrizó ayer en Londres acompañado por un séquito de quinientas personas y rodeado por un aura de popularidad nunca visto dentro de la clase política mundial.
En plena crisis económica y con los norteamericanos perdiendo sus empleos, parece mentira que su mandatario haya decidido tirar la casa por la ventana y coronar su visita con chefs, una flota de helicópteros y una limusina blindada más propia de cualquier superproducción de Hollywood. Cualquier cosa para sentirse como en su propio hogar, aunque en el extranjero.
«Cuando el presidente viaja, la Casa Blanca viaja con él y le acompaña en su coche, prueba sus bebidas y comidas o se asegura de que todo esté correcto. Al fin y al cabo Estados Unidos sigue siendo una superpotencia y su presidente debe ser capaz de controlar cualquier crisis desde cualquier punta del planeta», explicaba ayer al periódico británico 'The Guardian' un oficial de la Administración Obama.
Desde luego, que el mandatario demócrata podrá hacer maravillas desde 'La bestia', como cariñosamente se conoce a la limusina acorazada que lo trasladará por las calles de Londres. No, no se confundan, no se trata de un vehículo al uso. Esta maravilla de la naturaleza, que cuesta alrededor de 300.000 dólares -225.000 euros-, cuenta con visión nocturna, cañones de gas, tanques de oxígeno y, por supuesto, está completamente blindado. Eso sí, su conductor lleva ya unos días por las carreteras británicas para adaptarse a aquello de conducir por la izquierda.
No cabe duda de que la seguridad que rodea al presidente es absoluta. De hecho su equipo ha realizado tres viajes previos a las zonas que visite para desplegar su equipo, probar la comida ante un posible envenenamiento o medir la calidad del aire que respiraría el mandatario.
Protección personal
Unos 200 oficiales del servicio secreto servirán de escudo para Obama, quien también se ha traído su propio helicóptero, el 'Marine One', con el que aterrizó en casa del embajador estadounidense en Regents Park.
Todos aquellos que hayan cruzado el Atlántico se preguntarán cómo es posible que Obama muestre un rostro descansado si rastro de 'jet lag'. Cabe recordar que el 'Air Force One', el avión que transporta al mandatario, cuenta con su propio gimnasio, sistema de defensa electrónica y un complejo aparato de defensa que protege su sistema de comunicaciones de cualquier ataque nuclear. A bordo, viajan sus cocineros favoritos y seis médicos que velarán por su salud. Todo para que no eche de menos a su país.
Belfast quedó el lunes paralizada como consecuencia de los avisos de bomba y alertas de seguridad emitidas por el Gobierno tras los graves episodios de violencia callejera protagonizados por disidentes del IRA, en Ulster.
Los ataques callejeros, que fueron totalmente coordinados, cortaron carreteras e interrumpieron el tráfico sumiendo a la ciudad en un auténtico caos. Los responsables de estos altercados llegaron a robar varios coches que posteriormente quemaron para agravar la situación en la capital norirlandesa.
«Las amenazas de bomba y los robos han causado una grave molestia a la gente que iba al trabajo o trataba de seguir su vida cotidiana», lamentó la parlamentaria Caral Ni Chuilin. Según la Policía, carreteras de toda la ciudad fueron cortadas y algunas zonas tuvieron que ser evacuadas por temor a explosiones después de que al menos siete vehículos, entre ellos un camión y una furgoneta de reparto, fueran abandonados en diferentes puntos.
Las fuentes policiales no aclararon quién está tras los disturbios, pero un representante de Sinn Fein, que condenó los ataques, sugirió que eran obra de disidentes del IRA que pretenden poner fin por la fuerza al control británico de la provincia. De hecho, los actos violentos se reavivaron el mes pasado. El 6 de marzo dos soldados fueron tiroteados a las puertas de su cuartel y un agente fue asesinado dos días después.
Las recientes acciones terroristas han convulsionado Irlanda del Norte tras un largo periodo de calma impulsado con el acuerdo de paz de 1998. El IRA Auténtico y el de Continuidad, escindidos del antiguo brazo armado de Sinn Fein, reivindicaron los ataques. Tanto republicanos como unionistas repudiaron los asesinatos.
En los últimos 19 años el grupo Heimattreu Deutsche Jugend (HDJ) se ha dedicado a adoctrinar a jóvenes fanáticos para defender la «pureza de la sangre» y luchar contra el peligro que representan para Alemania los judíos y los extranjeros. Para alcanzar la meta con la que soñó Hitler, sus seguidores recibían instrucción militar que les debía ayudar a convertirse en la «nueva elite neonazi» del país.
Pero todo terminó ayer, cuando el ministro del Interior, Wolfgang Schäuble, anunció la prohibición de HDJ «por constituir una amenaza para la nación alemana». «Acabamos con sus repugnantes actividades. Haremos lo posible para proteger a nuestros niños y jóvenes de esos cazadores de ratas», añadió.
Las investigaciones para ilegalizar el grupo, cuyo nombre significa Juventud Alemana Fiel a la Patria, comenzaron en agosto. Entonces, la Policía desmanteló un campamento de verano en el estado de Mecklenburgo-Pomerania Occidental, un land marcado por el renacimiento neonazi. Allí, 39 muchachos y muchachas de 8 a 14 años recibían adoctrinamiento con ideología nacionalsocialista rodeados de pañuelos con la cruz gamada, canciones y propaganda que enaltecían al führer. Los jóvenes fueron enviados a sus casas y las instalaciones cerradas.
Pero las investigaciones prosiguieron hasta ayer, cuando el ministro Schäuble dio por cerrado el caso tras varias detenciones llevadas a cabo en los estados de Berlín, Brandeburgo, Baja Sajonia y Sajonia.