Así sonó el pregón
| JEREZ Actualizado: GuardarLo primero que pudimos ver, o mejor dicho, escuchar en el Villamarta, fue Cristo de la Defensión de Abel Moreno, interpretado por la Banda Municipal de Música, dirigida por Francisco Orellana. A telón bajado, le costó entrar en la melodía de la preciosa marcha dedicada al portentoso Cristo del Convento de Capuchinos, y aunque algo acelerada, consiguió poco a poco irse entonando.
Tras unos tímidos aplausos, el telón del Villamarta subió, y pudimos ver la presidencia completa, con la primera autoridad de la ciudad presidiendo aunque sin Juan del Río, arzobispo castrense, ni José Mazuelos, obispo electo de la diócesis. Sonó de fondo Jesús Flagelado, del propio director de la Banda Municipal, en un claro guiño de Manuel Garrido Arcas a la que ha sido desde siempre su hermandad, y se notó que la formación iba mejorando conforme pasaban los acordes de la misma.
La sorpresa principal se produjo cuando el hermano del pregonero iba finalizando su presentación, e introducía un aporte musical inesperado. Recordando al padre Jesús, Garrido Arcas anunció que sonaría el comienzo del pregón del mercedario, que atronó por la megafonía del Teatro Villamarta. Discreto, el presentador fue retirándose hasta su asiento, besó a su hermano, y el pregonero tomó posesión de un atril que ya no abandonaría hasta que se bajó el telón.
Una pieza musical inesperada, y que nos trajo el recuerdo del bueno del padre mercedario, que fallecía hace ahora unos meses, y que ambos hermanos quisieron que nadie olvidara. El himno nacional puso el broche de oro a un esperado pregón que sí sorprendió musicalmente hablando.