Arnaud Desplechin: «Todas las historias ya han sido contadas»
Catherine Deneuve y Mathieu Amalric protagonizan 'Un cuento de Navidad'
| COLPISA. MADRID Actualizado: GuardarArnaud Desplechin se adelanta a la Navidad con un cuento sobre una familia disfuncional. La gran diva del cine francés, Catherine Deneuve, encabeza el reparto de Un cuento de Navidad, producción que su autor pensó como una versión gala de una película sobre el Día de Acción de Gracias americano. «Me gusta pensar que todo lo que hago forma parte de un género, que se parece a un filme clásico y que lo que muestro ya lo hemos visto en pantalla. Como todas las historias ya han sido contadas, se trata de cómo narrar lo que ya han contado otros», declaró este heredero de la nouvelle vague en la visita que hizo hace dos semanas a nuestro país.
Al director y guionista de este título que se estrena este viernes no le ha salido un cuento. La muerte y el dolor están presentes en este encuentro familiar lleno de secretos, encuentros y desencuentros, odio, amor, pasión, amistad, necesidad de cariño y humor. «Soy consciente de que los personajes son brutales, extremos, pero al mismo tiempo demuestran una gran valentía al decir cosas muy fuertes, incluso irreverentes, lo que creo es muy personal. Soy el primer espectador de mi historia y a mí también me chocan sus conversaciones», declaró.
Y es que en Un cuento de Navidad hay una madre que confiesa a su hijo que nunca le ha querido, dos hermanos que no se entienden y una mujer que logra que su hermano desaparezca de su vida y de la de su hijo. «No estoy a favor ni en contra de la familia, núcleo en el que se da de todo. Cuando conoces a la madre de tu amigo, sabes mucho de ese amigo. De pequeños, todos ocultamos a nuestra familia, nos da incluso vergüenza y llegamos a pensar que cuanto menos se sepa de ella, mucho mejor», indicó el cineasta.
Diversidad
La prematura muerte del hijo primogénito por una rara enfermedad genética que también padece la matriarca del clan es el detonante de esta historia coral en la que la gran Deneuve está arropada por el cada vez más solicitado Mathieu Amalric -La escafandra y la mariposa y la última entrega de James Bond-, Jean Paul Roussillon -ganó el César al mejor actor de reparto por este trabajo-, Anne Consigny y su hija, Chiara Mastronianni. «Catherine es una reina, pero ayudó mucho en el rodaje y estaba encantada por la falta de jerarquía. Nunca escribo pensando en un intérprete, ni siquiera en la Deneuve. Con cada uno trabajo individualmente los pequeños detalles, lo que hablo es secreto, no lo sabe el resto, lo que produce cierta tensión cuando se encuentran», comentó.
El propio Desplechin reconoce que esta historia podía haber sido un dramón, «pero no lo es. Incluso a los actores les sorprendió lo ligeras y burlescas que eran algunas escenas. De haber caído en el melodrama, hubiera contado una mentira, y mi apuesta era la verdad y la honestidad», aseguró el autor de Mi vida sexual.
Muy influenciado por el cine estadounidense, «que a pesar de las secuelas, remakes y trilogías, goza de buena salud y cuenta con autores muy interesantes, muchos de ellos financiados por dinero europeo», el cineasta no tiene intención de hacer las maletas «para intentar hacer lo que hacen muy bien en Estados Unidos. Estoy encantado en mi país, donde ya no hay un único cine porque coexisten sin problemas películas muy distintas. El cine francés gusta, dentro y fuera de sus fronteras, por su diversidad», concluyó.