Scotland Yard investiga si el MI5 ayudó a torturar a un ex preso de Guantánamo
Actualizado:«Mis piernas se hincharon y mis muñecas y manos se entumecieron. Una vez incluso fui encadenado a raíles». Es el relato de las torturas sufridas por Binyam Mohamed, un etíope con residencia británica que regresó hace un mes del penal de Guantánamo sin que Estados Unidos hubiera encontrado pruebas inculpatoria.
Su calvario comenzó en 2002 cuando fue detenido por EE UU en Pakistán donde, según sus abogados, simplemente intentaba superar su adicción a las drogas. Trasladado por la CIA a una cárcel de Marruecos, allí habría sido torturado e interrogado por algún agente de los servicios británicos del MI5.
Según la organización Reprieve, que representa al ex preso, durante su detención en le hicieron desnudarse completamente y le hirieron con un escalpelo en el pecho y en el pene. A pesar de ello, Binyam reconoció que su peor momento llegó cuando sus interrogadores le hicieron preguntas sobre su vida en Londres como solicitante de asilo político.