En busca de la buena senda

Separar el duelo que el Xerez disputará esta tarde ante Las Palmas de las balas que rompieron el silencio de la madrugada del martes es tan complicado como girar hacia atrás las agujas del reloj e impedir que Joaquín Bilbao emborronara su trayectoria y ensuciara la cara de un Xerez al que había lavado durante tres meses. El impacto -especialmente mediático- que ha tenido el suceso que ha protagonizado el ya ex presidente xerecista ha roto la armonía del líder de la categoría justo en el momento que peores síntomas deportivos estaba desprendiendo el conjunto de Esteban Vigo.

Pero el vestuario azulino quiso desmarcarse de toda esta historia desde el primer instante y además ha contando con la complicidad de un calendario que los ha sacado del epicentro del tiroteo para mandarlos fuera de la península. Esteban y sus hombres quisieron dejar en Jerez toda la movida y olvidar bajo el sol canario todo lo que no sea continuar con su particular e histórica pugna por el ascenso. Por lo pronto, el primero de los objetivos es intentar mantener el liderato y volver a la senda de la victoria tras tres encuentros sin sumar un triunfo. La semana pasada, la Real Sociedad rompió una racha de diez partidos sin conocer la derrota. Frente al Rayo Vallecano y al Levante dio las últimas bocanadas, y el conjunto vasco apuntilló a un Xerez Deportivo que durante sólo media hora sacó los galones del líder.

Última bala

Ahora, Las Palmas, inmerso en su propia basura, tratará de levantar cabeza a costa de un Xerez aparentemente vulnerable. Javier Vidales, técnico de la Unión Deportiva, se juega su puesto, pues lejos de haber demostrado capacidad para resolver los problemas de Las Palmas, ha colocado a los canarios a sólo un punto de la zona de descenso. Sus últimos resultados no han sido nada positivos, pues sólo logró sumar un punto ante el Sevilla Cenicienta Atlético y un triunfo ante el Alavés, antes de aglutinar tres derrotas consecutivas. Por tanto, parece más que justificado el ultimátum al preparador del conjunto amarillo.

En el plano estrictamente deportivo, el Xerez continúa sin aclarar si hay vida más allá de Emilio Viqueira, pues desde que el gallego se tumbara en la camilla de la enfermería, los xerecistas no han catado victoria alguna. Sobre los hombros de Jorge Luque recayó la complicada labor de tapar el hueco de Viqueira, y al cordobés se le ha exigido que adquiera ritmo de partidos, dé pases en profundidad y saque conejos de la chistera a la velocidad de la luz.

Su aparición en el Ciudad de Valencia no fue brillante, pero las críticas le convirtieron en principal culpable del empate ante el Levante. Aquello no sirvió para tumbarle, pues frente a la Real creció varios enteros y, por ello, parece que Esteban mantendrá su confianza en Jorge también para jugar en el Insular.

En la banda derecha, parece que Pedro Ríos ha recuperado definitivamente su puesto en el once y sólo el nombre del punta que acompañará a Bermejo se mantiene aún en el aire. Antoñito, Sarmiento y Calle se reparten las opciones, y parece que cualquiera de ellos podría aparecer en el once. Si la línea continuista que Esteban ha mostrado en la convocatoria también se extrapola al once, entonces será Brian el que vuelva a formar pareja con el cántabro, pero el entrenador xerecista nunca ha puesto de inicio al argentino lejos de Chapín, por tanto no habría que descartar que Antoñito volviera al titular para conformar nuevamente la pareja de delanteros que más éxitos le ha dado al Deportivo.

En Las Palmas, su entrenador gasta la última bala ante el Xerez. Se juega el puesto, pero parece que lo hace con el apoyo de gran parte de sus jugadores. La afición no parece estar del lado de Javier Vidales, pero se espera que abarrote las gradas del Insular para sacar al equipo de la zona más baja de la clasificación.

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