El presidente del Xerez dimite al verse implicado en los disparos contra un pub
Joaquín Bilbao prestó ayer declaración en los juzgados tras pasar la noche en el calabozo, pero salió en libertad al autoinculparse el chófer
Actualizado:El presidente del Xerez Deportivo, Joaquín Bilbao, presentó ayer su dimisión tras quedar en libertad sin fianza por su vinculación con el incidente sucedido en el pub de La Unión en la madrugada del pasado martes y en el que se produjeron varios disparos contra la puerta del local. El cargo al frente del club lo asumirá el antiguo portero xerecista Carlos Osma, tal y como decidió ayer el consejo de administración de la entidad, en una reunión de urgencia que se celebró poco después de que Bilbao abandonara los juzgados tras prestar declaración.
Según fuentes policiales, el ya ex presidente y su chófer, Antonio Sánchez, fueron detenidos el pasado miércoles, uno durante la mañana y otro por la tarde, por su presunta implicación en los disparos efectuados al club de alterne el día anterior. Una vez que ambos ofrecieron su versión de los hechos a los agentes, pasaron la noche en los calabozos de la Comisaría jerezana, hasta que, a eso de las 11.00 horas de ayer, fueron puestos a disposición judicial.
Como explicaron desde la Subdelegación del Gobierno, el chófer se autoinculpó de lo ocurrido, por lo que la Policía lo trasladó ante el juez acusado de un delito o falta de daños (según la cuantía); de tenencia ilícita de armas; de atentado contra la autoridad pública (ya que los disparos se efectuaron en el casco urbano) y de infracción del reglamento de armas. En lo que respecta a Bilbao, se le imputó un delito o falta de amenazas, por la pelea previa que tuvo lugar en el local.
En cuanto a lo sucedido, fuentes de la investigación explicaron que todo partió de una trifulca ocurrida en el pub horas antes, en la que participó el todavía presidente del Xerez y que acabó con un importante hematoma en el ojo como consecuencia de una agresión. Algo después, sobre las 04.00 horas y supuestamente por «venganza», los dos detenidos volvieron en el turismo de Bilbao y presuntamente uno de ellos efectuó los tres disparos que impactaron en la puerta y en el cristal del bar, que afortunadamente ya se encontraba cerrado y por tanto vacío en el momento del ataque. Las pesquisas policiales se centraron en la versión de la persona que regenta el club y sus trabajadoras, de nacionalidad rusa, que apuntaron directamente a los imputados.
Las mismas fuentes policiales informaron de que Bilbao tiene licencia de armas porque practica el tiro olímpico, algo que, no obstante, no le eximiría de culpa en caso de haber utilizado la pistola durante esa madrugada, puesto que la licencia «se limita al trayecto de tu casa al campo de tiro». Además, este periódico ha podido confirmar que a la mañana siguiente de los hechos, esta misma persona fue al cuartel de la Guardia Civil a dar de baja un arma registrada a su nombre.
Una vez en el Juzgado de Instrucción número 3, los dos acusados se ratificaron en su declaración inicial, inculpándose por tanto Antonio Sánchez en lo ocurrido. Unas tres horas después, ambos salieron precipitadamente de los juzgados y pasadas dos horas el empresario jerezano acudió al consejo de administración. Mientras permanecieron en las dependencias judiciales, el vicepresidente del Xerez Deportivo, Manuel González Gamero, se acercó al edificio de Tomás García Figueras a interesarse por lo ocurrido.
Tras ver personalmente a los dos acusados, Gamero aseguró que el todavía presidente estaba «tranquilo y bien, ya que es una cuestión personal, sólo que ha habido un boom por el cargo que ocupa».
«Copitas mal tomadas»
El vicepresidente también restó importancia al suceso, argumentando que se trató de «unas copitas mal tomadas». Como han confirmado a este medio tanto fuentes judiciales como de la Subdelegación, los dos se encuentran en libertad sin fianza aunque con cargos, puesto que el procedimiento continúa abierto y tendrá que ser el juez el que decida si persiste la instrucción o se dictamina el archivo de la causa.
Bilbao podría estar vinculado, además, con un delito de daños al considerarse cómplice o coautor de los hechos, aunque en cualquier caso su condena por esto se reduciría a una multa.
El letrado del ex presidente, Antonio García Figueroa, dio una versión bien distinta de lo sucedido. Aunque reconoció que su representado acudió al juzgado por una cuestión de daños y amenazas, aseguró que nada tenía que ver con los disparos al pub. Figueroa mareó la perdiz insistiendo en que «no se puede hablar de que haya salido con cargos o sin cargos», insistiendo en que no se ha producido la calificación de los hechos y, por tanto, «no hay acusación firme contra Bilbao».