El tiroteo al pub esconde un posible ajuste de cuentas

La Policía Nacional continúa las investigaciones en torno al tiroteo que se produjo contra un pub durante la madrugada del pasado martes en la avenida Tomás García Figueras. Por el momento, los agentes no han detenido a ninguna persona relacionada con los hechos, ya que cuando llegaron al lugar en cuestión sólo encontraron casquillos de bala de pequeño calibre. Lo que sí ha trascendido es que cobra fuerza la hipótesis de un ajuste de cuentas, dado que se trata de un club de alterne, por lo que el suceso podría estar relacionado con alguna deuda pendiente de cobro.

El local es regentado por un grupo de ciudadanas rusas y, aunque el suceso causó conmoción entre el vecindario, los negocios anexos han reconocido que nunca habían tenido ningún tipo de problema con estas personas con anterioridad a lo ocurrido. «Nosotros le hemos estado llevando de comer cada noche -aseguraba la trabajadora de un bar cercano- y podemos decir que es de la gente más normal o menos problemática que ha pasado por aquí en los últimos años».

No obstante, reconocía que el tiroteo le ha despertado cierto temor, en especial cuando se acerca la madrugada y tiene que retirar las mesas de la calle. En el mismo sitio también se encuentra un estanco, cuyos propietarios confesaban un cierto miedo, aunque, por la diferencia de horarios entre los negocios, «nosotros no hacíamos vida ninguna con ellos». Ayer por la mañana la Policía ya retiró el precinto y el cristal que fue dañado se reparó, por lo que sólo se observaban vestigios de lo sucedido en la puerta, que aún presenta los dos agujeros provocados por los disparos.

La Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Comisaría de Jerez se ha hecho cargo del asunto, aunque el hermetismo en este sentido es absoluto. Lo único cierto es que los profesionales han analizado las balas que impactaron contra la puerta y el cristal del pub, y que pocas pruebas más pudieron recabar, puesto que los disparos se hicieron desde un vehículo en marcha.

Los hechos ocurrieron a alrededor de las 04.40 horas, cuando la Policía Local recibió la llamada de un vecino tras oir el tiroteo y fue ésta quien dio aviso a su vez al Cuerpo Nacional. Afortunadamente, a esas horas ya no había nadie dentro del local, que se encontraba cerrado.

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