Las dos mujeres bajo amenaza de desalojo acampan frente al Consistorio

Inmaculada González y Lidia Florido pasaron la noche de ayer frente al Ayuntamiento, donde acamparon desde el mediodía a la espera de una respuesta «de los políticos» al calvario que están viviendo. La primera se enfrentará al desahucio el próximo día 30, ya que no puede hacer frente al alquiler de la casa en la que habita (avenida de León de Carranza) con sus hijos. La segunda ha tenido que «pegar una patada a una puerta» y plantarse en una vivienda que no es la suya, en la barriada de San Juan de Dios, por lo que puede ser desalojada de manera forzosa en cualquier momento.

A partir de las 13.30 horas de ayer, aproximadamente, estas dos mujeres llevaron sus protestas más lejos y decidieron acampar frente al mismo Consistorio, aunque se lo han puesto difícil, ya que la Policía Local les impidió llegar a montar las tiendas de campaña. Antes, habían mantenido una reunión con el delegado de Vivienda, Antonio Fernández Ortega, «quien nos ha dicho que nos tenemos que apañar un mes y medio y que si nos vemos en la calle antes, pues que nos vayamos a un albergue».

Y es que según Inmaculada, «eso de entrar en la lista para la adjudicación de una casa es para callarnos la boca; además, aunque esperemos, no nos asegura que vaya a ser así, que nos vayan a dar la casa. Estoy hasta el pelo de escuchar porquerías de los políticos, puedes decirlo así de claro», insistió.

«A la intemperie»

Su malestar aumentó cuando los agentes policiales, cumpliendo órdenes, nos les dejaron montar las tiendas, «por lo que no tendremos más remedio que dormir a la intemperie».

En concreto, pasaron la noche de ayer allí Inmaculada y su hijo de 16 años; y Lidia, que estuvo acompañada por su hermana. «Por cierto, que eso que han dicho de que estábamos con menores en edad escolar es mentira: ellos estaban en el colegio a su hora», señalaron ambas.

La indignación de estas madres, solteras, con hijos menores y en paro, iba en aumento: «Hay muchas viviendas vacías, por ejemplo en San Juan de Dios, pero nos dicen que son propiedad del Ayuntamiento, cuando no las van a tirar hasta dentro de ¿dos años!», subrayaron.

En cualquier caso, «y después de que los políticos hayan jugado con nuestros sentimientos», no piensan retirarse del lugar hasta que les den una solución.

eesteban@lavozdigital.es