DEBATE. Miguel Toledo es uno de los que rechaza el pacto. / T. B.
PUERTO REAL

«En las próximas elecciones no votaré»

El acuerdo de Barroso y Mosquera suscita división de opiniones entre los ciudadanos

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El día después de la firma del pacto de Gobierno entre IU y PSOE, las reacciones en la calle no se hicieron esperar. Los puertorrealeños han mostrado su parecer por este acuerdo, que ha generado una fuerte división de opiniones entre los ciudadanos. El debate está servido.

Enrique Daneri, propietario de un conocido puesto de mariscos y pescados de la plaza de Abastos señaló que «no me parece bien, porque entonces las elecciones no sirven absolutamente para nada, pues mucha propaganda electoral y después los políticos hacen lo que les da la gana».

Para Miguel Toledo, sucesor familiar de una popular carnicería, el acuerdo realizado es «antinatural», y apunta que «el pacto estaba conchabado desde las elecciones, lo que pasa es que entonces no era el momento idóneo de anunciarlo. Para mí esto es sólo mercancía dura y pura».

Por su parte, el dueño de la taberna flamenca El Fillo, José Antonio Rosado, señaló que si el pacto «era para bien de la ciudad, le parecía adecuado». «Ahora bien, si vamos a estar siempre con lo mismo, nos habrán engañado. Respeto los acuerdos entre políticos, porque cada uno tiene sus superiores y si desde arriba le dicen que hagan un pacto, tienen que hacerlo, pero si de verdad es mejor para el pueblo», dijo Rosado.

De forma diferente se pronunció Pedro Hidalgo, hermano mayor de la Hermandad del Rocío, quien manifestó que «el pacto me parece vergonzoso, aunque pudiera traer algo positivo para la localidad. Los ciudadanos votamos a una fuerza política para que gobierne, pero eso de que hoy nos odiamos y matamos, y mañana firmamos un trato, no me parece de recibo. Tampoco estoy de acuerdo con los tránsfugas, el concejal que dimita que se vaya a la calle y que entre el próximo de la lista, y nada de pasar al grupo mixto para después negociar con un determinado partido».

Como muestra del desencanto de algunos puertorrealeños está el caso de Antonio Cosano, más conocido como Regaera, apodo que heredó de su abuelo. Cosano, persona muy popular en la población y propietario de un local de ultramarinos, indicó que «ya en las últimas elecciones municipales estaba bastante desencantado de la política; pero ahora, después de este pacto que han firmado el señor Barroso y la señora Mosquera, estoy tan desencantado que es casi seguro que en los próximos comicios me echaré atrás y seguramente no vote. Me da igual quién vaya a salir de alcalde, porque después y gracias a estos acuerdos, gobernará quien sea basado sólo en los intereses personales».