El marroquí acusado de ser el patrón de una patera dice que él pagó 1.200 euros como los demás
LA VOZ Actualizado: GuardarEl marroquí juzgado hoy en la Audiencia Provincial de Cádiz acusado de ser el patrón de una embarcación que fue interceptada cuando viajaba con 31 inmigrantes a bordo, manifestó que iba en la embarcación "como los demás" tripulantes y que había pagado 1.200 euros para hacer la travesía.
Según el escrito de acusación de la Fiscalía al que tuvo acceso Europa Press, los hechos ocurrieron el 26 de mayo del pasado año cuando Salvamento Marítimo interceptó una embarcación neumática con un sólo motor a 40 millas del Faro de Trafalgar.
En la embarcación viajaban un total de 31 inmigrantes que habían pagado entre 600 y 1.200 euros por el traslado. La Fiscalía destaca en su escrito que el acusado trataba de introducirlos en España a sabiendas de que carecían de cualquier tipo de documentación que le habilitara para entrar o permanecer en territorio nacional.
Asimismo, la Fiscalía señala que durante el trayecto se puso en peligro la vida y la integridad física de los ocupantes de la embarcación al ser una travesía muy prolongada, de 20 horas, no contando además la embarcación con las más elementales medidas de seguridad, siendo la embarcación además de un solo motor.
El acusado manifestó que no sabía el motivo por el que se encontraba siendo juzgado y aseguró que era uno más de los que viajaban en la embarcación, para lo cual pagó 1.200 euros a una persona en Marruecos que no iba en dicha expedición.
Asimismo, afirmó que no sabía su durante la travesía, que duró 20 horas en vez de seis horas como estaba previsto, se perdieron o no, ya que insistió en varias ocasiones en que no conocía el mar.
Dos policía que comparecieron como testigo, señalaron que una vez que los tripulantes de la embarcación fueron conducidos a dependencias policiales, dos de ellos señalaron al acusado como patrón de la embarcación.
En este sentido, destacaron que ambas personas declararon sin querer ser beneficiados por colaborar con la justicia española, ya que "sólo querían volver a Marruecos con sus familias".
Por su parte, la Fiscalía elevó a definitiva la petición de ocho años de prisión al dar credibilidad al testimonio y el informe policial, mientras que la defensa solicitó la libre absolución al considerar que no quedó acreditado que el acusado fuera el patrón de la embarcación.