Inesperada prórroga para el rebote

El rebote parecía agotado por la mañana: las Bolsas asiáticas habían cerrado con significativas pérdidas y los indicadores del Viejo Continente también comenzaban su andadura en rojo. El Ibex llegó, incluso, a caer con fuerza y a testar el nivel de los 7.000 puntos. Pero los inversores tienen descontadas todas las malas noticias que puedan conocerse y cualquier buena noticia, por pequeña que sea, es buena excusa para retomar pequeñas posiciones en Bolsa. O, simplemente, para cerrar las masivas posiciones bajistas que actualmente existen en el mercado. Eso fue lo que sucedió: en Estados Unidos se publicó un buen dato de ventas al por menor, lo que inyectó optimismo a Wall Street y, como consecuencia, también a los mercados europeos. Las ventas minoristas aumentaron un 0,7%, frente a la caída del 0,4% que esperaba el mercado. ¿Significa esto que comienza a verse la luz al final del túnel, aunque sólo sea en la economía estadounidense? Quizá. Los analistas sí comienzan a observar algún buen dato en Estados Unidos.