El Barça no falla y tendrá el factor pista a favor ante el TAU

La victoria, no por amplia, fue sencilla. De salida, fueron tan certeros los dos cañoneros barcelonistas: Basile y Navarro; en los lanzamientos exteriores que sin aparente esfuerzo, el Barça cobró ventaja en el marcador con rapidez (9-13, m.5).

Sin embargo, los de Xavi Pascual se olvidaron del manual, ese concepto baloncestístico que les ha permitido firmar buenos partidos esta temporada y fueron perdiendo terreno. Sin defensa, permitiendo rebotes ofensivos del rival, sin trabajar posicionalmente en ataque, los azulgrana encajaron un parcial 7-0, con una gran aportación de Lior Eliyahu, que tomó las riendas en el juego interior ante la baja de D'Or Fischer.

Pasó a dominar el Maccabi y el Barça no encontraba soluciones a sus problemas en la dirección y también en el rebote. Se empecinó el equipo azulgrana en jugar desde fuera, pese a su superioridad en la pintura, y los israelíes se fueron encontrando cada vez más cómodos y dominaron con una máxima de 5 puntos (22-17).

Pascual le dio vueltas a su equipo, hasta el punto en que en el segundo cuarto ya había contado con cuatro bases -hasta André Barrett tuvo sus minutos- para mejorar en la dirección. Sin embargo, las soluciones llegaron de la mano de Fran Vázquez. El gallego anotó ocho puntos consecutivamente en el segundo cuarto y metió a su equipo en el partido.

El componente idóneo

Entre los puntos de Vázquez y el recuperado acierto exterior de Basile, el Barça fue encontrándose cada vez más a gusto. En los últimos 1:40 minutos del segundo cuarto, los catalanes rompieron el partido con un parcial 2-7 que les permitió llegar al descanso con una máxima ventaja de seis puntos (39-45).

Con Basile, prácticamente infalible desde la larga distancia, y la garantía que supone el juego de Fran Vázquez en la pintura, el Barça se fue sintiendo cada vez más cómodo. Sólo el tesón y el orgullo de los locales, que llegaron a perder por 10 puntos en más de una ocasión, permitió al Maccabi rehacerse, sobre todo por el acierto de Marcus Brown desde el perímetro.

Ante la ausencia de directores de juego -Sada no estuvo bien; a Lakovic le faltan partidos después de su problema físico; y Barrett, apenas cuenta-, Navarro se erigió en el jugador encargado de templar el ritmo del partido y, en esa faceta, 'La bomba' también sacó buena nota.

El Barça se fue escapando poco a poco (55-66, al término del tercer cuarto) y dinamitó el partido de nuevo con Basile (58-73). El último estertor del Maccabi les acercó hasta el 64-73, pero los azulgrana ya no hicieron más concesiones, apretaron en defensa, cerraron el rebote y un importante partido con absoluta solvencia (74-90).