aniversario de la tragedia de madrid

Diez personajes del 11-M...cinco años después

La vida de algunos de los protagonistas clave aquellos días ha cambiado mucho

MADRID Actualizado: Guardar
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El juez que llevó la investigación sobre los atentados del 11-M ejerce ahora en la Audiencia Provincial de Murcia; el diputado que presidió la comisión de investigación en el Congreso es el jefe del Gobierno de Canarias; y el que era director general de la Policía trabaja como eurodiputado en Bruselas. Cinco años después del 11-M, la vida de algunos de los personajes clave aquellos días ha cambiado mucho. O no tanto.

José María Aznar

A punto de dejar la Presidencia del Gobierno cuando se perpetraron los atentados, interpretó la masacre terrorista como una acción para cambiar el curso político de España y evitar la victoria electoral del PP. Tras retirarse del primer plano político y prodigarse ahora en conferencias por todo el mundo, el actual presidente de la Fundación FAES negó que su Gobierno tuviera intención de mentir al apuntar inicialmente a ETA como autora de los atentados y dijo y mantiene que quienes idearon el 11-M "no están ni en desiertos remotos ni en montañas lejanas".

José Luis Rodríguez Zapatero

El actual presidente del Gobierno logró su primer triunfo en las urnas tres días después de los atentados y siempre ha considerado una insidia que se vinculara su victoria a esa acción terrorista. A su juicio, fueron los errores del Gobierno del PP los que provocaron el vuelco electoral, entre ellos el "engaño masivo" sobre la autoría de los atentados o una decisión que elevó el riesgo de ser objetivo de los terroristas: el envío de tropas a Irak que él rectificó nada más acceder a la Moncloa.

Mariano Rajoy

Las encuestas le situaban a las puertas de La Moncloa tras ser el elegido por Aznar para relevarle, pero aunque no logró su objetivo ni en esos comicios ni en los de 2008, se mantiene al frente del PP convencido de que puede conseguirlo a la tercera y tras una renovación de su partido no exenta de críticas internas. Ha defendido en todo momento la actuación que tuvo el Gobierno del que formaba parte tras perpetrarse los atentados y ha insistido en la necesidad de seguir investigando, incluso después de la sentencia judicial del caso, porque los que fueron acusados como inductores o autores intelectuales no fueron condenados como tales.

Ángel Acebes

Ministro del Interior el día de los atentados, el que fuera secretario general del PP hasta el último Congreso de este partido y uno de los nombres barajados por Aznar para sucederle, vive una etapa de diputado raso y no faltan las cábalas sobre el momento en el que, siguiendo los pasos de Eduardo Zaplana, pueda pasar a la empresa privada. Fue la voz del Gobierno que más se escuchó en las horas posteriores al atentado insistiendo en que la principal línea de investigación apuntaba a ETA, lo que le convirtió en una de las dianas preferidas de las críticas socialistas, que consideraban que el Ejecutivo mentía sobre la autoría de los atentados para minimizar su impacto en las urnas.

Alfredo Pérez-Rubalcaba

Su frase de que los españoles se merecen un Gobierno que no les mienta, pronunciada horas después de los atentados, abanderó las críticas socialistas a la información del Gabinete de Aznar sobre la autoría de la masacre. Lo hizo desde la oposición en su condición de dirigente socialista responsable de asuntos de terrorismo y, tras la victoria del PSOE, lo siguió haciendo como portavoz en el Congreso antes de dar el salto en 2006 al Ministerio de Interior.

Paulino Rivero

Los grupos del Congreso situaron a este diputado de Coalición Canaria al frente de la comisión parlamentaria que investigó los atentados y que, con el voto en contra del PP, aprobó un texto que concluyó que el anterior Gobierno manipuló la información de la masacre por interés electoral y descuidó la seguridad ante el terrorismo islamista. Rivero, quien logró la presidencia de Canarias tras las últimas elecciones autonómicas, defendió el trabajo de la comisión y consideró que las medidas acordadas suponían el mejor homenaje a las víctimas.

Juan del Olmo

Murciano, nacido en 1958, asumió la investigación del 11-M por encontrarse de guardia ese día. La instrucción del sumario 20/2004 le llevó dos años y cuatro meses, le costó serios problemas de salud y le convirtió en objeto de ataques políticos y mediáticos desde sectores disconformes con su línea de investigación, que descartó la autoría de ETA desde el principio. Finalizada la instrucción, decidió abandonar Madrid y solicitó una plaza en una sección penal de la Audiencia Provincial de Murcia, donde ejerce en la actualidad.

Olga Sánchez

Era la fiscal adscrita al Juzgado Central de Instrucción número 6, el de Del Olmo. De su intervención en el caso destaca la "experiencia enriquecedora" que ha supuesto para ella el contacto con las víctimas. Al contrario que el juez, que nunca respondió a los ataques, Sánchez incluyó en su informe final en el juicio una agria crítica al tratamiento que algunos medios de comunicación dieron a los atentados, en referencia a la difusión de teorías conspirativas sobre el 11-M. El 27 de febrero de 2008 ascendió a fiscal del Tribunal Supremo.

Agustín Díaz de Mera

Hombre de confianza y amigo de Ángel Acebes, Díaz de Mera era el director general de la Policía cuando se produjeron los atentados, cargo en el que fue sustituido tras la victoria electoral del PSOE, lo que le llevó ese mismo año a dar el salto a la política europea. Hoy, además de eurodiputado, es vicepresidente de la Comisión Nacional de Inmigración del PP. Unas declaraciones en las que afirmaba que conocía un informe que relacionaba a ETA con el 11-M provocaron su citación como testigo en el juicio, donde repitió lo mismo. Su negativa a dar al tribunal el nombre del policía que le informó sobre ese supuesto documento le costó una multa de mil euros y la apertura de un procedimiento por un delito de desobediencia grave. Al final reveló su "fuente".

Pilar Manjón

Nacida en Cáceres en 1958 y afiliada a Comisiones Obreras desde 1977, el 11-M trabajaba en el Instituto Nacional de Técnicas Aeroespaciales (INTA). Ese día perdió a su hijo Daniel en uno de los trenes y cambió su vida. Pidió la baja laboral y fue nombrada portavoz de la Asociación 11-M Afectados por el Terrorismo. Su intervención en la comisión de investigación del Congreso el 15 de diciembre de 2004, con un discurso en el que pidió justicia, transparencia y reparación para las víctimas y en el que no faltó la denuncia a las disputas partidistas a raíz de los atentados, estremeció a toda España. Su imagen, siempre vestida de negro, se ha convertido en un símbolo.