El Gobierno sale al rescate de los astilleros con 150 millones de euros

El Gobierno prevé salir al rescate de los astilleros con el establecimiento de una nueva línea de crédito. Para ello, el Ministerio de Economía y Hacienda última la concesión, con carácter urgente, de 150 millones destinados a la financiación de las factorías privadas de construcción naval.

La decisión es una respuesta a la insistente demanda de UGT. El sindicato lleva más de dos meses alarmado por la repercusión que la sequía de los mercados tiene en el sector, preocupación que ha trasmitido al Ejecutivo. La central socialista advierte que «está en peligro la continuidad de la obra en curso».

Las instalaciones beneficiadas por la nueva línea de crédito serán las 26 empresas que integran PYMAR (Pequeños y Medianos Astilleros en Reconversión), distribuidas por las comunidades de Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, Cataluña, C. Valenciana, Murcia, Andalucía, Canarias y Baleares. Estas factorías generan en conjunto alrededor de 2.700 empleos directos y unos 8.000 en las industriales auxiliares.

La medida se aplicará lógicamente vía Instituto de Crédito Oficial (ICO) y contará con el aval de PYMAR a través de su Fondo Patrimonial de Garantías. El responsable del sector naval de UGT, José Luis Gafio, desveló que los dirigentes de la entidad financiera se han puesto en contacto hace unos días con la cúpula de la asociación de los astilleros para diseñar, concretar y cerrar la operación.

Gafio señaló que la situación se complica «a pasos agigantados». Recordó que el funcionamiento de los astilleros ha sido y es muy peculiar, siempre vinculado a la concesión de créditos, dado el altísimo coste de las obras. «El préstamo es el único mecanismo que permite abordar la construcción naval», remarcó.

La falta de disponible cuestiona además el cumplimiento de los compromisos contractuales adquiridos con los armadores, puesto que los plazos de entrega pueden dilatarse, hecho que justificaría la cancelación de la obra concertada. El representante sindical informó que es preciso adoptar medidas preventivas para que no ocurra en España lo que sucede en diferentes países de la Unión Europea (UE), como Francia y Alemania, donde ha comenzado la anulación de encargos.

Otra circunstancia que ha llevado al sindicato a acudir urgentemente al Gobierno es el buen momento que atraviesa el sector, con una cartera repleta de pedidos. «Es una oportunidad que no podemos desaprovechar después de años de graves dificultades y de lucha por conseguir mercado», comentó Gafio. «Hay carga de trabajo hasta finales de 2010. Incluso en algunas factorías la actividad asegurada se extiende más allá», añadió. El futuro más prometedor corresponde a las instalaciones de Barreras, Freire y Vulcano, en Vigo; Zamacona, en el País Vasco; y Gondan y Armón, en Asturias. Igualmente se encuentra bastante despejado el porvenir de los astilleros de Canarias y de Baleares, dedicados a reparaciones y a la construcción de embarcaciones de recreo.

Por su parte, la Asociación de Navieros Españoles (ANAVE) ha expresado su satisfacción por la línea del ICO, dotada con 6.000 millones, destinada a las medianas empresas aprobada el pasado viernes por el Gobierno. La organización dice que la medida no es para subvencionar a empresas insolventes sino para «desbloquear la financiación de compañías viables».