Triunfo chiclanero que alimenta el sueño de la permanencia

Segunda victoria consecutiva del Chiclana, que corta una racha idéntica del Dos Hermanas para acercarse un poco más a la salvación. El partido, muy igualado y vistoso en la primera parte, se decidió en la reanudación, cuando Núñez García dejó a los nazarenos con nueve y señaló un dudoso penalti a favor de los gaditanos, más necesitados que su rival. Por cierto que el informador arbitral confesó que su recomendación será que el onubense no dirija más partidos en un tiempo.

Un fallo garrafal del cancerbero local propiciaría el 0-1: el coriano le pide a Chiqui López que la deje pasar, pero Dani Almendro, colándose entre ambos, aprovecha el regalo para marcar a placer.

Los pupilos de José María Sutil se fueron enseguida a por el empate, que consiguieron al filo de la media hora después de un disparo raso de Chiqui Carmona que Juan Carlos empujó en la línea. En el 30, Dani Albacete centra, toca Chiqui Carmona y Maye desvía a córner con los pies, mientras que, a dos minutos del intermedio, Juan Carlos no ajusta lo suficiente la vaselina tras un mal despeje del portero gaditano.

Revolución chiclanera

En la reanudación, las alternativas volvieron a hacer acto de aparición, porque ninguno de los contendientes se conformaba con el resultado. A los diez minutos se desata la polémica, puesto que los nazarenos entienden que Maye saca de dentro de su portería un centro-chut de Curro. El colegiado no sólo no quiso ver nada, sino que inició un recital que tendría sus momentos estelares, excepción hecha del rosario de amarillas e interrupciones, en el 65 y el 70. Primero, Núñez García señala un riguroso penalti de Dani Albacete a Ñoño, lo que supone la expulsión del canterano rojiazul, que había visto una primera tarjeta estando en el banquillo. Nene no desdeña la oportunidad y convierte la pena máxima para poner el 1-2 en el marcador del encuentro.

Seguidamente, y tras un centro de Sema que Chiqui Carmona manda alto de cabeza, José Miguel sustituye a Rafa García para reforzar la vanguardia local, si bien el delantero está tan sólo unos segundos sobre el césped artificial del Miguel Román. Y es que el árbitro interpreta como agresión un inexistente codazo en el salto con un contrario, por lo que le manda a la caseta y deja al Dos Hermanas con nueve. Sería la puntilla para los ánimos del cuadro anfitrión, que se desfondó en busca del milagro, pero que vio cómo el Chiclana, en dos buenas acciones a la contra, redondeaba la goleada con sendos tantos de Joselito y Ñoño.