tensión en el avispero del cáucaso

La OTAN restablece las relaciones formales con Rusia

El secretario general justifica que "es un actor mundial" por lo que la falta de diálogo "no es una opción"

BRUSELAS Actualizado: Guardar
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Los ministros de Exteriores de la OTAN han aceptado por unanimidad la petición de la secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, de restablecer las relaciones plenas con Rusia, suspendidas desde el pasado mes de agosto por la guerra de Georgia. Así lo ha anunciado el secretario general de a Alianza Atlántica, Jaap de Hoop Scheffer quien ha dicho que la reanudación de relaciones incluirá las reuniones al más alto nivel y tendrá lugar "lo antes posible" tras la cumbre de la Alianza de jefes de Estado y Gobierno que se celebrará a comienzos de abril.

El consejo informal de ministros de Exteriores, el primero al que ha acudido Clinton, se ha alargado más de lo previsto debido a la oposición inicial de Lituania, que consideraba que era pronto para volver a tender puentes con Rusia. Pero finalmente ha pesado más la conveniencia de elevar la colaboración de Moscú sobre Afganistán e Irán.

El secretario general de la OTAN ha dicho que Rusia "es un actor mundial" por lo que la falta de diálogo con Moscú "no es una opción" a pesar de las diferencias con la política exterior del Kremlin. Mientras que el ministro de Asuntos Exteriores español, Miguel Ángel Moratinos, se ha congratulado de esta decisión de recuperar el diálogo con los rusos y ha recordado que los propios georgianos están negociando con ellos en Ginebra, como parte de los acuerdos a los que se llegó para parar el conflicto de agosto. "No nos pidan ser más georgianos que los georgianos", ha dicho en rueda de prensa el jefe de la diplomacia española para quién "sería paradójico que todo el mundo hable con los rusos -la Unión Europea (UE), EEUU, etc- menos la OTAN ".

Clinton pide tranquilidad

La secretaria de Estado estadounidense, que mañana se reunirá en Ginebra con su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, ha enviado un mensaje de tranquilidad a los países aliados más reacios a recuperar el diálogo, tanto a las naciones del este de Europa como a Ucrania y Georgia, con las que se celebraron después sendos consejos. "Estamos muy al tanto de las preocupaciones específicas de una serie de países en el este de Europa (...) pero EEUU no reconocerá que ninguna nación tiene una esfera de influencia sobre otras", ha asegurado Clinton, parafraseando al vicepresidente estadounidense, Joe Biden, en la conferencia de Seguridad de Múnich.

A Ucrania y Georgia, a las que hasta ahora se ha negado el acceso al llamado "Plan de acción para la adhesión" a la organización, en parte por la fuerte oposición de Rusia a esa posibilidad, Clinton les ha asegurado que "EEUU está comprometido a que estas naciones sigan su camino hacia la OTAN " y ha añadido que su país tiene un "fuerte compromiso" para que estas repúblicas caucásicas "no sean el objeto de la intimidación o agresión de Rusia".

Durante su intervención a puerta cerrada, la secretaria de Estado norteamericana ha abogado por un "nuevo comienzo" en las relaciones entre la OTAN y Rusia, al tiempo que ha pedido al resto de los aliados "realismo" para superar las diferencias. A juicio de Clinton, no debe interpretarse la eventual recuperación de las reuniones formales y regulares del Consejo OTAN -Rusia como una "recompensa o concesión" a Moscú y ha invitado a observar los "potenciales beneficios" de colaborar con este país en problemas como la piratería, el terrorismo y, sobre todo, el conflicto en Afganistán y la proliferación nuclear en Irán.

Puente hacia Afganistán

Para la OTAN es muy importante contar con la autorización de Rusia para pasar por su territorio y hacer llegar material para la Misión Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) que tiene desplegada la organización en el país asiático.

Precisamente Afganistán será el centro de la visita que efectuará la próxima semana a la OTAN el vicepresidente de EEUU, Joe Biden, que quiere preparar el terreno de cara a la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de los días 3 y 4 de abril en Estrasburgo (Francia) y Kehl (Alemania). Los aliados deberán responder en esta ocasión a la petición concreta del presidente de Estados Unidos, Barak Obama, de enviar más medios a la zona.