El Gobierno argentino y los agricultores firman un acuerdo que podría acabar con casi un año de conflicto

El Gobierno y las patronales agropecuarias de Argentina han firmado un acuerdo en el que se establecen algunas medidas de fomento para el sector rural, que desde hace casi un año mantiene un conflicto con el Ejecutivo. Este pacto incluye mejoras para la producción de lácteos, trigo y carnes de vacuno, además de una futura búsqueda de soluciones para las economías regionales.

El contenido del pacto ha sido acordado durante una reunión entre los dirigentes de las cuatro mayores entidades rurales del país con la ministra de Producción, Débora Giorgi, y a la que por sorpresa se ha sumado la presidenta argentina, Cristina Fernández, con quien los líderes rurales no se entrevistaban desde junio de 2008.

"Esperamos que esto sea el fin el conflicto", ha señalado el ministro del Interior, Florencio Randazzo, quien también ha estado presente en la reunión. Randazzo ha destacado en una rueda de prensa que la presencia de la presidenta ha sido "determinante" para alcanzar este acuerdo, que el funcionario ha calificado de "muy positivo" y un "importante avance". El ministro ha remarcado la necesidad de que todos los sectores económicos trabajen para hacer frente a los efectos de la crisis global.

Siete meses de silencio

La reunión de hoy, que ha durado casi seis horas y a la que también ha asistido el secretario de Agricultura, Carlos Cheppi, es la segunda que se celebra en una semana tras siete meses sin diálogo entre el campo y el Gobierno, que mantienen desde marzo de 2008 un severo conflicto por los impuestos a las exportaciones de granos. Las medidas acordadas suponen, entre otras, mejoras en los precios que reciben los productores de trigo y leche, la apertura de las exportaciones de trigo y algunos cortes de carnes de vacuno, la eliminación de los impuestos a las exportaciones de lácteos y el otorgamiento de compensaciones a productores rurales.

Por su parte, Mario Llambías, titular de las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), ha aclarado que las conversaciones con el Gobierno deberán proseguir para resolver otros puntos, como los impuestos a las exportaciones de soja. "Somos conscientes de la gravedad de la situación, tanto del país como del sector productivo, y en ese marco queremos encontrar soluciones", ha añadido Llambías, quien se ha mostrado cauto respecto al cumplimiento de este acuerdo, ya que ha recordado que otras veces no se concretaron las medidas anunciadas por el Gobierno.