Comienza otra Liga con las derrotas del Barca y los triunfos del Madrid
La defensa ambos equipos ha sido clave en la remontada de los blancos y en el estancamiento de los catalanes en las últimas semanas
Actualizado:Emoción por todo lo alto. Las diez victorias consecutivas del Real Madrid y los tropiezos del Barça permiten vivir un final de Liga mucho más ajustado de lo previsto. Los ocho puntos recortados en tres jornadas proporcionan un campeonato nuevo concentrado en los trece encuentros que faltan para terminar el campeonato. Más allá del mejor o peor estado físico de los jugadores, o del factor psicológico y grado de motivación, la remontada del Madrid está cimentada en su mejoría defensiva. Una fortaleza que coincide con la fragilidad de la zaga barcelonista. Mientras Schuster estuvo en el banquillo, el Madrid encajó en 14 jornadas 24 goles. En los 11 encuentros de Juande Ramos sólo cuatro.
El técnico de Pedro Muñoz avisó nada más aterrizar en el Bernabéu que su primer objetivo era reducir la sangría de goles en contra. Para cumplir el reto contó con Lass. El jugador francés es el pivote defensivo sobre el que recae la responsabilidad de abortar o entorpecer los ataques rivales. El ex del Portsmouth da equilibrio al equipo y gracias a su potencia e impecable colocación evita que se parta en dos.
El líder de los zagueros blancos es Pepe. El central portugués se ha granjeado el respeto de compañeros y adversarios. Seguro, sobrio, veloz y contundente. Será una baja muy sensible para el derbi del sábado. Cannavaro y Heinze han mejorado su rendimiento y sólo Sergio Ramos parece algo más descentrado.
Todo lo contrario le ocurre al Barcelona. Los azulgrana eran el equipo menos goleado hasta visitar el Calderón. En la primera vuelta, los de Guardiola terminaron con 13 goles en contra. En los 11 encuentros de la segunda vuelta llevan 11. Agüero y Forlán dieron la puntilla a una defensa muy tibia. Márquez y Puyol pusieron en bandeja al Kun las dos dianas para su hijo recién nacido. Los cuatro tantos colchoneros se unen a los encajados ante Espanyol (2), Betis (2), Sporting (1), Racing (1) y Numancia (1). A la fragilidad defensiva del Barça se une su escasa diversificación goleadora. Eto'o, Messi y Henry acaparan el 73% de los tantos culés. El triunvirato vive del oxígeno del medio campo. Con Iniesta lesionado, los rivales sólo deben tapar a Xavi para inutilizar las poderosas armas ofensivas del Barça.