Touriño dimite como secretario general del PSdeG tras el regreso del PP a la Xunta
Asume "la responsabilidad" por los resultados electorales que han otorgado la mayoría absoluta a Feijóo en Galicia con 39 escaños
SANTIAGO/MADRID Actualizado: GuardarEl secretario general del PSdeG, Emilio Pérez Touriño, ha presentado su dimisión a la Ejecutiva de su partido tras los resultados electorales registrados anoche en los que el PPdeG consiguió la mayoría absoluta con 39 escaños.
El hasta ahora presidente de la Xunta, y líder de los socialistas gallegos desde 1998, ha declarado que se trata de "una decisión personal y e intransferible" porque asume "la responsabilidad", después de que su partido perdiese un escaño en las elecciones de ayer por la provincia de Pontevedra. Además, el PPdeG también sumó un escaño más por la provincia de La Coruña que le arrebató al BNG, con lo que alcanzó los 39 diputados en la Cámara gallega.
"Ayer las urnas dejaron claro un resultado de mayoría absoluta para el PP y como secretario xeral quiero y debo asumirlo", ha afirmado, y ha explicado que su sucesión se decidirá en función de un congreso que se celebrará "en su momento". "Mi responsabilidad concluye y paso a ser un militante entusiasta y animoso, pero un militante de a pie", ha zanjado.
A su juicio, en el PSdeG "debe abrirse una nueva etapa" con "nuevos liderazgos" tras haber culminado una trayectoria "de crecimiento" de la que ha asegurado sentirse "especialmente orgulloso". "Hace apenas 10 años, el partido tenía 13 diputados y ahora tiene 24 o 25 -falta el recuento del voto emigrante- y gobierna en la mayor parte de ayuntamientos y ciudades de Galicia", ha expuesto, y ha asegurado que "tampoco se trata de ningún descalabro".
Asume el fracaso como propio
Preguntado por las causas que han llevado a que el PPdeG a lograr la mayoría absoluta con 39 escaños, un resultado que ha definido como "claro y contundente", el presidente en funciones ha entonado el mea culpa. "No fui capaz de transmitir una sensación de Gobierno confiable en un contexto de crisis y de no dar una imagen de bigobierno". "Yo asumo mi responsabilidad por no haber respondido en condiciones, porque no fui capaz de percibir el daño que hacía esa mentira" ha espetado.
Sobre la conveniencia de haber adelantado las elecciones, Touriño se ha descrito como una persona "pertinaz" y considera que esa forma de ser fue la que "condujo al PSdeG a superar su anemia y a gobernar Galicia". Según ha explicado, los motivos que le llevaron a no adelantar los comicios fueron la necesidad de aprobar los presupuestos de la Comunidad gallega "en plena efervescencia de la crisis". "Hacía falta un presidente que diera la cara y no que convocara un proceso electoral". "Fue mi decisión y la asumo", ha zanjado el socialista, y ha subrayado que su renuncia es "irrevocable". No obstante, no ha aclarado si renunciará a su escaño como diputado, puesto que no es una de sus "preocupaciones" en el actual momento.
Touriño ha señalado que ayer habló con el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero y ha explicado que los primeros en conocer su decisión han sido sus compañeros de partido. Asimismo, ha insistido en que su intención de convertirse en un militante más, no supone que quede un vacío de poder en el partido, que tendrá que celebrar un congreso para su sucesión.
El anuncio llega tras las declaraciones de esta mañana del número dos del PSOE, José Blanco, quien aseguraba a Onda Cero y Antena 3 que los resultados que han dado la mayoría absoluta a Alberto Núñez Feijóo en Galicia no hay que "analizarlos en caliente, sino sosegadamente, y a partir de ahí extraer conclusiones. Señalar con el dedo acusador a nadie para escabullir el bulto de la responsabilidad". Después de lo cual, Blanco ha dicho que el PSdeG "tiene que abrir una nueva etapa" a partir de "la reflexión", lo que dejaba prácticamente la puerta abierta a Touriño.
De cara al futuro, el PSdeG constituirá una comisión gestora para dirigir el partido. La intención de los socialistas gallegos es agilizar al máximo los plazos para la convocatoria de un congreso extraordinario que decida un nuevo liderazgo.