El éxito de la moderación

Hasta la crisis del 'Prestige', Alberto Núñez Feijóo (1961) era uno más de los jóvenes valores del PP de Galicia. Vinculado al Gobierno regional desde 1985, año en que ingresó como funcionario en el Cuerpo Superior de la Administración General de la Xunta, este orensano de la aldea de Os Peares ha transitado por todos los escalafones de la política gallega hasta convertirse, al primer intento, en presidente de la Xunta. La Consellería de Obras Públicas, donde tuvo que lidiar con los daños causados por el chapapote, fue el primer trampolín del político que ayer devolvió al PP a la presidencia de Galicia.

De orígenes modestos, Nuñez Feijóo fue el primer licenciado universitario de su familia. Tras aprobar la carrera de Derecho, entró a trabajar en las consejerías de Economía y Agricultura antes de recalar en Sanidad y Servicios Sociales como secretario general técnico en 1991. Ahí dio su primer gran salto: desembarcó como vicepresidente y secretario general del Servicio Gallego de Salud de la mano de Romay Beccaría, que se lo llevó a Madrid cuando fue nombrado ministro de Sanidad en el primer Gobierno de Aznar. Más tarde, Álvarez Cascos lo eligió para dirigir Correos y Telégrafos, desde donde Fraga lo recuperó para el Gobierno gallego.

En enero del 2003, Nuñez Feijóo sustituyó al entonces conselleiro de Obras Públicas, el todopoderoso Xosé Cuiña, que tuvo que dimitir tras conocerse que una empresa de su familia había vendido palas y equipos para la limpieza del chapapote. Cuiña era entonces el hombre fuerte del partido y el verdadero delfín de Fraga, que, sin embargo, no había dudado en crear una vicepresidencia de la Xunta para Nuñez Feijóo en 2004.

Tras la derrota de Fraga y su renuncia, en 2005, el enfrentamiento de Cuiña, cabeza visible del grupo de la 'boina' (sector rural del PP), con Nuñez Feijóo (cercano a los dirigentes urbanos, conocidos como 'birretes') estuvo a punto de provocar un cisma en el PP.

Pero el congreso popular gallego celebrado en enero del 2006 cerró las heridas: Nuñez Feijóo, con el apoyo del presidente del PP, Mariano Rajoy, fue elegido presidente de la formación con el 96% de los apoyos. La muerte de Cuiña, en diciembre del 2007, víctima de una neumonía, dejó expedito el camino del liderazgo para Nuñez Feijóo, que actualmente mantiene al partido unido en torno a su figura. Desde su cargo de secretario general del PP de Galicia, se ha labrado una imagen de moderación y centrismo en la línea de Alberto Ruiz Gallardón, que no ha dudado en acudir a apoyar a su compañero. Aunque muchos lo catalogan como 'marianista', Nuñez Feijóo elude encuadrarse en ninguna vertiente de su partido y se reconoce amigo de dirigentes como Aznar, Aguirre, Rato o González Pons.

Aficionado al deporte, seguidor de las nuevas tecnologías (cuenta con un perfil en Facebook) y liberal en los aspectos morales (acudió a la boda de un concejal gay de Orense semanas después de que su partido presentara un recurso de inconstitucionalidad contra esta ley), Nuñez Feijóo sigue soltero a sus 47 años. Según ha declarado su madre, «está casado con Galicia, pero ésta no le da nietos». O no le daba, hasta ayer.