ESPAÑA

Touriño pasea mientras Núñez Feijóo corre

La de ayer fue una jornada de descanso para los políticos gallegos. El candidato a la reelección de la presidencia de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, sólo salió de su domicilio un rato por la mañana para dar un paseo, sin corbata, por la 'Granxa do Xesto', en el Monte Pedroso, en las inmediaciones de su residencia oficial. Acompañado de su esposa, desayunó en una terraza del parque e invitó a los periodistas que le seguían. En una charla informal se mostró convencido de que la participación será alta porque «el pueblo gallego es sabio, maduro y trabajador y no va a dejar escapar el 1 de marzo sin decidir». Luego, Pérez Touriño se encerró en su casa de Santiago con su mujer, sus nietos y sus dos hijos, Andrea y Daniel. Este último viajó desde Madrid para acompañar a su padre en las horas previas a las elecciones.

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El popular Alberto Núñez Feijóo fue el más activo de todos los presidenciables. Por la mañana salió a correr, acompañado por un amigo, por el Monte de Castrelos de Vigo, donde reside. El candidato del PP confesó que durante las dos semanas de campaña ha tenido olvidado el deporte y que ahora tenía la necesidad de «desentumecer los músculos». Tras las carreras, como el resto de cabezas de lista, dedicó el día a sus familiares, con quienes comió en la localidad de Os Peares. El nacionalista Anxo Quintana se esmeró ayer en cuidar de su delicada garganta, castigada por los mítines y que cerca ha estado de llevarle a la afonía. Eso sí, no perdonó el aperitivo a la orilla del río Arnoia con unos amigos.