
El lince de Sierra Morena liberado en Doñana recorre casi 200 kilómetros
Su seguimiento ha proporcionado una valiosa información para las reintroducciones de estos felinos que se pretenden hacer este otoño en Córdoba No hay constancia de que 'Caribú', un macho de tres años, se haya apareado
Actualizado: GuardarCaribú, el lince de Sierra Morena liberado en Doñana el 25 de noviembre para aumentar la variabilidad genética de la escasa población de este felino en este espacio protegido, ha recorrido en estos tres meses casi doscientos kilómetros por la provincia de Huelva. Caribú, macho de tres años, fue liberado en un cercado de ocho hectáreas en pleno corazón de Doñana para que se aparease, pero no hay constancia de que lo haya logrado y sí de su amplia dispersión «porque aún era un macho subadulto, a pesar de sus tres años», ha dicho el director del programa LIFE para el lince ibérico, Miguel Ángel Simón.
Simón cree que Caribú no se ha comportado como Baya -el macho de Sierra Morena liberado en Doñana en 2007 que se apareó con tres hembras- porque no ha entrado en celo y se ha comportado como un subadulto, con tendencia a dispersarse y a regresar a su lugar de nacimiento. Este comportamiento, frecuente en los felinos, ya lo protagonizó hace años Domingo, un lince trasladado de Doñana a Sierra Morena que fue capturado en Cádiz tras recorrer centenares de kilómetros. Estas dispersiones también se han comprobado en traslados de linces boreales para reforzar poblaciones en Suiza y de linces canadienses en Estados Unidos.
Caribú fue liberado en un cercado dotado con cámaras que le siguieron las 24 horas, construido cerca de la laguna de Santa Olalla, zona con la máxima protección del parque nacional de Doñana y alejada de carreteras y de la presencia humana.
El 29 de diciembre, técnicos del programa LIFE abrieron el cercado al comprobar que se relacionaba con Bonares, una hembra de la zona. Pasados unos días, Bonares se dirigió hacia el interior de Doñana, mientras que Caribú lo hizo en dirección opuesta, cruzó la carretera de Almonte a Matalascañas por el paso para fauna de La Soriana y se estableció junto al centro de cría en cautividad de El Acebuche.
Técnicos del programa LIFE tuvieron que capturarlo el 10 de enero después de que saltase el vallado y se colara en el centro de cría, perturbando el celo de los felinos allí recluidos.
Caribú fue devuelto al cercado de Santa Olalla, donde volvió a relacionarse con Bonares, a la que dejó entrar en el recinto con uno de sus cachorros.
El proceso se complicó el 17 de enero cuando apareció en la zona Boliche, un macho instalado más al norte de Santa Olalla que saltó la valla del cercado, momento en el que Simón decidió abrir las puertas para evitar la pelea entre ambos machos, muy peligrosa en época de celo.
Cerca de El Rocío
Superado el incidente, Boliche regresó a su zona habitual de campeo, mientras que Caribú cruzó por segunda vez la carretera de Almonte a Matalascañas y se instaló, ya a principios de febrero, en una finca cercana al Rocío, con abundante población de conejo, en la que campea una hembra con la que interactuó.
El seguimiento permanente permitió comprobar que Caribú tampoco se estabilizó en este lugar y se dispersó hacia el norte de Huelva, cruzando la autopista entre Sevilla y Huelva por el río Tinto, entre las localidades de Niebla y Villarrasa, y viajando hacia el norte y a mayor velocidad. Tras rebasar Valverde del Camino, se adentró hasta Jabugo desde donde, a comienzos de esta semana, ha iniciado el regreso al sur. Simón confía en que este lince se asiente definitivamente en Doñana, aunque será capturado si se adentra en una zona peligrosa.
Ha añadido que Caribú ha recorrido en estos tres meses casi doscientos kilómetros llegando a estar a unos cien en línea recta de Santa Olalla.
Su seguimiento ha proporcionado una valiosa información para las reintroducciones de linces que se pretenden realizar este otoño en el Guadalmellato (Córdoba). «Sabemos que estos comportamientos se han producido en numerosos traslados de linces y el seguimiento de Caribú ha proporcionado información sobre en qué momento se produce y por qué razones, y además ha comprobado que los pasos de fauna en las carreteras son efectivos».