Los populares mantienen en suspenso el Pacto de la Justicia pese al cese del ministro
Mariano Rajoy recibió la noticia con una expresión de alivio: «Ya era hora»
Actualizado: Guardar«No es una cuestión personal», alegó el portavoz de Justicia e Interior del PP, Federico Trillo, cuando explicó que su partido mantendrá interrumpido el Pacto de la Justicia con el Gobierno a pesar del relevo en el ministerio del ramo. El primer partido de la oposición no le dará ni los cien días de cortesía al nuevo titular de la cartera y se mantendrá firme en su insistencia de pedir explicaciones sobre la «connivencia» entre el Ejecutivo, la Fiscalía General del Estado y el juez Baltasar Garzón en la «trama contra el PP» por la instrucción del sumario de la Audiencia Nacional sobre la red, en la que están implicados cargos públicos populares.
Con la renuncia de Fernández Bermejo, el partido opositor se ha quedado sin el principal instrumento de confrontación con el PSOE en esta campaña electoral. No obstante, los populares conservan intacto su discurso para responsabilizar al PSOE de las actuaciones del juez y los fiscales anticorrupción, aunque ahora tiren por elevación y pidan explicaciones al presidente del Gobierno. «Exigimos hoy, y seguiremos exigiendo, que Zapatero explique las relaciones de su Gobierno con el Poder Judicial», reclamó Trillo en una declaración ante los medios de comunicación cuando se conoció la dimisión del ministro.
Desde Galicia, donde se vuelca en apoyo de su candidato a las elecciones autonómicas, Mariano Rajoy saludó la noticia con una expresión de alivio. «Ya era hora», apuntó y añadió que «era una dimisión obligada porque en política se deben tener comportamientos acordes con lo que dice la razón, la ética y su propia condición de político». El líder de la oposición pidió a Caamaño «que se dedique a trabajar y resolver los problemas que tiene la Justicia en España».
El PP defiende que la cacería en la que el ministro dimisionario coincidió con el juez Garzón fue «el desencadenante» de su renuncia pero, además, Trillo declaró que su marcha «pone fin a una etapa nefasta» en el Ministerio en la que se produjeron tres huelgas de funcionarios, secretarios y jueces y en la que el ex ministro «no tomó ni una sola medida» para aliviar el atasco de los tribunales, aparte de que «soliviantó» al personal. «A los hechos conocidos añade su máxima incompetencia», dijo.
Por qué ahora
«Dimite por lo que se ha sabido, pero no aclara lo más grave», dijo el portavoz popular, «no explica qué ha sucedido», añadió en referencia a las supuestas coincidencias entre el Ejecutivo y el juez de la Audiencia Nacional. Trillo preguntó por qué Fernández Bermejo no se negó a abandonar el Gobierno hasta ahora y por qué Rodríguez Zapatero no le aceptó antes la dimisión. El Grupo Popular del Congreso tiene previsto «re estudiar» su estrategia parlamentaria y adaptarla a las nuevas circunstancias, aunque mantendrá como objetivo prioritario lograr que el Ejecutivo socialista asuma su responsabilidad en las incidencias del proceso judicial que se instruye en la Audiencia Nacional.
La presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, fue una de las dirigentes populares que mostró más claramente su satisfacción por la caída de Fernández Bermejo y lo hizo sin palabras. Cuando conoció la noticia, Aguirre se encontraba con los Príncipes en un acto oficial y exteriorizó su alegría con una gran sonrisa y un gesto inequívoco: el dedo pulgar hacia arriba.