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Solbes abre la puerta a intervenir bancos o cajas, pero descarta las nacionalizaciones
El BBVA defiende que el Fondo de Garantía de Depósitos rescate a las entidades con problemas, con posterior retorno al sector privado
Actualizado: GuardarLas turbulencias en el sistema financiero persisten y el Gobierno y alguno de los principales agentes del sector tomaron partido ante la crisis que no cesa. El vicepresidente económico, Pedro Solbes, dio a entender, durante su intervención en la V Conferencia Internacional de ABC, que entre los bancos y cajas españoles «puede producirse alguna intervención, lo que no tiene nada que ver con una nacionalización». En ese mismo foro, el presidente de BBVA, Francisco González, apuntó que si alguna entidad financiera entra en crisis, habría que reproducir el modelo de rescate aplicado en los años sesenta y setenta.
«La mejor opción para salvar una entidad con problemas de solvencia es la intervención y el saneamiento por el Fondo de Garantía de Depósito, seguida de una vuelta al sector privado», declaró González, en una descripción del proceso seguido cuando pinchó Banesto en tiempos de la presidencia de Mario Conde. Antes, un esquema parecido se había aplicado en momentos en que se hundieron en cadena decenas de entidades. De la experiencia de algún reflotamiento surgió la idea de los Fondos de Garantía de Depósitos, uno para los bancos, otro para las cajas y un tercero para las cooperativas de crédito. Cada uno fue dotado por el propio subsector.
Solbes recordó que, frente a la crisis financiera, el Gobierno español ha adoptado todos los mecanismos acordados por el Consejo de la Unión Europea. Ya ha puesto en marcha la compra de activos y el programa de avales para las emisiones de deuda privada y también aprobó, en su día, la opción de recapitalizar a las entidades con fondos públicos, una tercera vía «que no se ha planteado» en España. «Aunque tenemos que estar dispuestos a la intervención, que puede ser de muchos tipos, yo soy muy reacio a la nacionalización», zanjó el dirigente económico, rechazando, de entrada, la adquisición de capital de un banco, o la vía equivalente en el caso de las cajas.
Ayudas públicas
Francisco González abundó previamente en esa misma línea. «Aunque en el sistema bancario español no han aparecido hasta ahora problemas de solvencia -se curó en salud-, la duración y la profundidad de la crisis serán las que determinen si, finalmente, emergerán dificultades en algunas entidades financieras». «Entre los mecanismos que hay que tener preparados -admitió- habrían de incluirse las ayudas públicas, incluso de capital, si bien estas tendrían que ser temporales y condicionadas a un plan de saneamiento y reestructuración de la entidad afectada».
España contempla esa opción con relativa normalidad, porque cuenta con exitosas experiencias. Banesto fue intervenido por el Banco de España y de su rescate corrió a cargo el Fondo de Garantía de Depósitos. Para reflotarlo, el Banco de España pidió auxilio al sector, y el entonces BBV le cedió un equipo liderado por Alfredo Sáenz. Casi todos ficharon luego por el Banco Santander que, posteriormente, se adjudicó la entidad por el procedimiento de subasta. Los activos malos de Banesto se traspasaron a una sociedad segregada hasta su posterior recuperación.
González elogió al vicepresidente Solbes como «un actor fundamental en el salto que ha dado la economía española en las tres últimas décadas». «Sabe que tiene detrás a gran parte del empresariado y de la gente que decide en esta país», insistió. El presidente de BBVA se extendió después en la justificación de las condiciones en las que el banco concede créditos. «Estamos haciendo un gran esfuerzo en términos de reestructuraciones, alargamiento de plazos y renegociaciones de créditos ya existentes», aseveró. En esa línea, informó que el banco también ha dado instrucciones a su red «para que se lo piensen mucho antes de denegar una petición», pero precisó que una entidad no puede dar préstamos «más allá de lo que la prudencia exige».