EXCEDENTE. Un operario apila ladrillos que no han sido vendidos en una fábrica madrileña. / REUTERS
Economia

La crisis impide a la industria erigirse en motor económico

La facturación y las entradas de pedidos se hundieron en diciembre y un 18% y un 25% en tasas interanuales

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La industria española subsiste ahogada por el brusco hundimiento de su negocio, y es incapaz de asumir el papel de motor de la economía que desempeñó la construcción de viviendas hasta el reventón de la burbuja inmobiliaria.

Antes de la crisis, Gobierno, sindicatos y empresarios auguraban que al sector industrial le tocaría 'tirar del carro' cuando el ladrillo -que llegó a alcanzar un peso del 18% del Producto Interior Bruto (PIB)- dejara de ser la base del crecimiento y de la generación de empleo. Esa previsión no se ha cumplido: la fabricación sufrió en diciembre y por tercer mes consecutivo una caída de dos dígitos en su facturación, que hay que sumar al mayor desplome de la historia en la producción.

Los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) reflejan que la cifra de negocios de la industria registró en el último mes de 2008 un descenso interanual del 18%. Es la tercera caída seguida de la facturación, cuyo retroceso en noviembre fue del 21,7%, el mayor de la historia, y en octubre del 10,7%. Las entradas de pedidos bajaron por quinto mes y en una proporción aún mayor, un 25,1%. También en el caso de los pedidos, las peores tasas se dieron entre octubre y diciembre, un trimestre en el que el PIB volvió a contraerse y la economía española cayó en el pozo de la recesión.

En el conjunto de 2008, la cifra de negocios de la industria descendió de media un 2,5%, con retrocesos del 13,7% en el segmento de bienes de consumo duradero, como automóviles y electrodomésticos; del 5,1% en bienes de equipo, usados para producir otros bienes, y del 6,8% en bienes intermedios. Por contra, aumentaron de forma tímida la facturación de bienes de consumo no duradero, un 1,4%, y de energía, un 14,1%. También en tasas anuales, el índice de entradas de pedidos cayó un 4% respecto de 2007. En este caso, las caídas fueron del 12,4% para los bienes de consumo duradero, del 11,8% en los bienes de equipo y del 7% en los bienes intermedios. Aumentaron un 1,8% en los bienes de consumo duradero y un 14,6% en la energía.

Descalabro

Todos estos datos certifican la debilidad de la industria española, cuya producción ya registró un descalabro del 6,7% en el conjunto de 2008 respecto del año anterior, según datos del Índice de Producción Industrial (IPI) corregido a efectos de calendario que elabora el INE. Ese batacazo confirma todos los males atribuidos al sector de la fabricación, que en el mes de septiembre entró en caída libre hasta registrar en diciembre un retroceso interanual récord, del 19,6%.

Detrás de este desastre se encuentra el mismo círculo que tiene amordazada al conjunto de la economía: los bancos no prestan, luego las empresas no invierten y los hogares han echado el freno al consumo. Hay que retroceder hasta enero de 1993, cuando el mundo estaba inmerso en otra grave crisis, para encontrar una situación comparable.