El juez envía a prisión al hermanastro del asesino confeso de Marta del Castillo

El juez que instruye el caso sobre la desaparición y muerte de Marta del Castillo envió a prisión incondicional y sin fianza al hermano del autor confeso, Francisco Javier Delgado, de 40 años, al considerar que hay «al menos indicios de complicidad» en los hechos, aunque él ha negado cualquier implicación. El sumario del caso ha permitido conocer las contradicciones en las que han incurrido los cuatro detenidos en su declaración, aunque para la Policía parece claro que todos ellos sacaron a hombros el cuerpo de la adolescente sevillana de la vivienda -envuelto en una manta- y lo trasladaron al río en el coche propiedad de la familia del menor implicado.

El último detenido por la muerte de Marta prestó ayer declaración ante el titular del juzgado de Instrucción número 4 de Sevilla por espacio de casi cuatro horas y, al igual que en días anteriores, su llegada y salida fue jaleada con insultos y gritos de «asesino» por parte de los numerosos ciudadanos congregados ante los juzgados. A partir de la declaración del menor acusado, que es el único que le implica, el juez considera que al menos hay indicios de que Francisco Javier encubrió lo ocurrido. Y no tanto en relación a su hermano Miguel (la ley le permite no declarar contra él) como por los otros dos detenidos, a los que no denunció.

Así, le ha imputado los mismos delitos que a Miguel Carcaño y Samuel Benítez, es decir, asesinato y alternativamente homicidio y detención ilegal. No obstante, su defensa ha solicitado su puesta en libertad y asegura que hay pruebas que confirman que no llegó a estar en la vivienda, por lo que han solicitado la comparecencia de compañeros y amigos de Francisco Javier Delgado para confirmar su coartada.

Según explicó el letrado, su defendido salió de la casa de León XIII en torno a las 20,30 horas y, tras pasar un tiempo en casa de su novia, no regresó hasta la madrugada, sobre las 5 horas, por lo que no pudo ver a la menor ni participar en su muerte.

La versión de Francisco Javier coincide con la ofrecida por su hermano Miguel, según consta en el sumario del caso cuyo secreto fue levantado hoy. De hecho, el único que sitúa a Francisco Javier en el escenario del crimen cuando Marta murió es el menor detenido, que se encuentra ingresado en un centro cerrado de internamiento como presunto encubridor, así como algunas llamadas telefónicas que constan en las actuaciones, posiblemente a raíz de la intervención de los móviles de Miguel.

El sumario desvela también que Miguel Carcaño se confesó autor de la muerte de Marta del Castillo el mismo día de su detención, el viernes 13 de febrero, y amplió su declaración sobre lo sucedido al día siguiente. Según su declaración, la joven murió tras un único golpe con un objeto contundente en el dormitorio de su vivienda de León XIII, por lo que su hermano podría no haberse enterado, aunque la Policía sostiene que la muerte se produjo en el salón y duda de que fuera un golpe certero.

Después, Miguel avisó a Samuel Benítez, que acudió a la vivienda junto al menor implicado, y entre todos sacaron a hombros el cuerpo de la joven envuelto en una manta, y lo metieron en el coche de la madre del menor. Samuel condujo el vehículo hasta el puente de Camas, seguido de cerca por Miguel en su propio ciclomotor. Tras deshacerse del cuerpo, el principal implicado y autor material de la muerte se dirigió a casa de su actual novia, mientras que Samuel y el menor regresaron junto a sus amigos para tener así una coartada.