José Antonio Barroso. / L.V.
PUERTO REAL

Cierran el desvío provisional al cementerio y buscan nuevas alternativas

El desvío directo desde la autovía a los aparcamientos del cementerio de San Roque, abierto, de forma provisional, hace dos semanas tras la inundación que a principios de febrero sufrió la carretera que conduce hasta el camposanto, se ha cerrado con una malla metálica a la espera de que se pueda ofrecer un acceso con todas las garantías de seguridad para el tráfico rodado.

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El alcalde de la ciudad, José Antonio Barroso, manifestó ayer que está pendiente de celebrar una reunión con el Subdelegado del Gobierno en Cádiz, Sebastián Saucedo, y responsables de la demarcación de carreteras y Guardia Civil para estudiar una medida definitiva.

Una de las actuaciones que se barajan es establecer un acceso reglado desde la autovía CA-32 aunque también se analizará proceder a una elevación de la carretera actual al cementerio que evite en un futuro nuevas inundaciones. Los técnicos tendrán que resolver cómo dar salida a las aguas pluviales ante el efecto de vaso comunicante que tienen las marismas con la carretera.

Actualmente la vía de acceso al camposanto tiene almacenada alrededor de 60 millones de litros de agua, según indican desde el propio Ayuntamiento. De momento, se descarta que se proceda a la extracción.