Caída en picado del Nazaret tras perder el tercer partido seguido

Caída en picado. Tercera derrota consecutiva del Nazaret Caja Inmaculada, tras perder por siete a dos en su desplazamiento hasta tierras cordobesas. El cuadro de Jesús Azurmendi no estuvo fino y terminó pagándolo con una nueva derrota, que deja al equipo muy tocado y lo aleja de las posiciones de privilegio, después de ver el fenomenal estado de forma de los conjuntos que le anteceden en la clasificación.

Desde los primeros minutos del partido, los jugadores locales salieron más concentrados a la cancha, fruto de ello llegaron los goles y a partir de entonces, pusieron tierra de por medio. Una diferencia de tres goles, tras haberse jugado doce minutos, fue un escalón demasiado grande para un equipo, los de Azurmendi, que no estaban finos y que en otras condiciones podrían haber realizado algo más grande. Pero de nuevo, la mala dinámica y los renglones torzidos iban a perseguir al Nazaret, que no terminaba de asentarse en el campo. A pesar de todo, con toda la artillería pesada sobre el campo, el cuadro jerezano iba a acortar distancias en el marcador antes del descanso. Bareta volvía a aparecer en un momento clave del partido y en el minuto quince lograba el primera de su equipo y ponía el marcador en un esperanzador tres a uno.

La reanudación del partido fue igualada, hasta el minuto 28, cuando de nuevo los cordobeses iban a poner distancia en el luminoso. De nuevo llegaba el desconcierto a la zona del Nazaret, factor que aprovechó el Aquasierra para hacer el cinco a uno.

Quedaba mucho tiempo y las esperanzas de remontar no se perdían. Aparecía otro hombre importante para el equipo de Azurmendi. Álex del Amor hacía el segundo, a falta de nueve minutos para el final y todo el equipo se vino arriba. Un esfuerzo que no serviría de nada, ya que, con toda la carne en el asador, y con el equipo volcado al ataque jugando con portero jugador, los locales iban a sentenciar, anotando dos goles más haciendo el siete a dos. Mal resultado, para el Nazaret, que coincide con la mala situación económica del equipo.