Ordóñez cree que el sistema de protección daña al mercado laboral

El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, abogó públicamente ayer por la reforma de la prestación de desempleo, apenas 24 horas después de que el presidente del Gobierno insistiera en que se mantendrá la cobertura social y rechazase abaratar el despido. Para Fernández Ordóñez, que intervino en unas jornadas en Zaragoza, se trata de un mecanismo que entorpece y desincentiva la búsqueda de trabajo y la movilidad laboral de los contratados. En esa línea, lamentó que no exista «una conciencia generalizada» de los daños que produce el sistema actual, carencia que, a su juicio, impedirá las reformas necesarias.

Fernández Ordóñez recomendó estudiar experiencias europeas para adquirir ideas y reformar el mercado laboral español. Como ejemplos a seguir, citó a Dinamarca (4,1% de paro), país que ha optado por mejorar el pago periódico y prácticamente ha suprimido la indemnización por despido; y a Austria (3,8% de paro), donde las empresas constituyen un fondo individual para cada uno de sus trabajadores, que se pone a disposición del titular si éste pierde la colocación. Es una especie de complemento de la prestación por desempleo entregada por el Estado. Cuando el trabajador consigue otro contrato se lleva la parte no consumida del fondo, que vuelve a ser engrosada con las aportaciones del nuevo empleador. Al final de su vida laboral, subraya el gobernador, esta 'hucha' disponible constituye una fuente adicional de recursos para la jubilación.

Fernández Ordóñez añadió que los costes de despido «a cargo exclusivamente del sector privado» desincentivan la contratación. Además, no favorecen la creación de empresas.