Los niños del CEIP Federico Mayo vuelven a clase tras una semana de protestas
Los 420 alumnos del CEIP Federico Mayo volvieron ayer a sentarse en sus pupitres después de una semana sin clase en la que, junto con sus padres y madres, protestaron por el mal estado del muro que circunda el centro escolar y otras deficiencias que presentan las instalaciones. La mañana de ayer transcurrió con normalidad en el colegio de la barriada de Federico Mayo después de que los primeros operarios llegaran a finales de la semana pasada para iniciar los trabajos de sustitución del muro.
Actualizado: GuardarFinalmente, la Delegación Provincial de Educación decidió demolerlo y sustituirlo por una valla perimetral. El mal estado del muro -en riesgo de derrumbe- era tal que se había instalado un perímetro de seguridad por dentro y por fuera del colegio. Así, esta deficiencia no afectaba solamente a la vida del centro escolar sino a la de toda el barrio puesto que la valla de seguridad provocó el corte de la calle J al tráfico durantes más de tres meses.
