UN SUEÑO. Una pareja observa las obras de construcción de su futura vivienda. / R. C.
Economia

Los parados con hipotecas tendrán cinco años más para reintegrar los pagos aplazados El BCE augura menos dificultades para lograr créditos en los próximos meses

El Gobierno retrasa, además, otros doce meses el momento a partir del cual los afectados tendrán que comenzar a devolver el dinero pendiente

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El Gobierno quiere aliviar la presión que padecen miles de parados, trabajadores autónomos que se han quedado sin negocio y pensionistas con cargas familiares, que cada mes se las ven y desean para pagar las letras de sus hipotecas y sacar adelante a sus familias. El Consejo de Ministros acordó en su reunión de ayer retrasar doce meses más el momento en que las personas acogidas a la Línea de Moratoria Hipotecaria, que permite aplazar el pago de la mitad de las cuotas mientras dure la crisis, tendrán que comenzar a devolver el dinero pendiente. Además, se amplía de los 10 años previstos inicialmente a 15 el período máximo para reintegrar esos pagos demorados.

La moratoria hipotecaria, aprobada por el Ejecutivo a finales de noviembre, permite retrasar el 50% de los créditos, con un máximo de 500 euros mensuales, durante 24 meses a los trabajadores que vayan al paro antes del 1 de enero de 2010, a los autónomos que echen el cierre antes de esa fecha, a quienes acrediten rentas muy bajas y a los pensionistas de viudedad. Sólo podrán beneficiarse, eso sí, quienes hubiesen suscrito antes del 1 de septiembre de 2008 una hipoteca por menos de 170.000 euros y no sean morosos. El período de aplazamiento de 24 mensualidades comenzará a aplicarse, además, a partir del 1 de marzo de 2009, en lugar del 1 de enero antes establecido.

Las reformas aprobadas ayer significan, en la práctica, que quienes se acojan a esta medida aplazarán la mitad del importe de su cuota hipotecaria, con un máximo de 500 euros, entre el 1 de marzo de 2009 y el 28 de febrero de 2011. Al día siguiente, el 1 de marzo de 2011, volverán a pagar la cuota completa, y sólo a partir del 1 de marzo de 2012 deberán empezar a devolver las cantidades aplazadas.

Hasta ahora, la Línea de Moratoria Hipotecaria ha tenido escaso éxito. Poco más de la mitad de las 67 entidades financieras adheridas han suscrito el correspondiente convenio para ponerla en marcha. La iniciativa no despega, y los empleados de las sucursales ignoran su funcionamiento. Fuentes del sector lo atribuyen al nulo interés que suscitan en los bancos y cajas estas operaciones, de carácter voluntario. Cuando un cliente es buen pagador, pero pasa por un mal momento, su entidad prefiere negociar directamente con él una ampliación de plazos y la consiguiente reducción de cuotas. El ICO, por su parte, atribuye la poca actividad de la línea a las necesidades de las entidades de adaptar sus programas informáticos.

El Gobierno decidió además autorizar al Instituto de Crédito Oficial (ICO) a utilizar fondos de la línea ICO-Pyme para la línea ICO-Liquidez, concebida para financiar capital circulante a pequeñas y medianas empresas solventes afectadas por las restricciones del crédito. Esta medida obedece a «la previsible mayor demanda» de esa segunda línea por la falta de dinero para afrontar gastos corrientes que sufrirán muchos negocios. También se amplía de 3 a 5 años el plazo de devolución de las cantidades aplazadas a través de la Línea de Moratoria para Pymes, que permite a los trabajadores autónomos y pequeñas y medianas empresas que hayan recibido préstamos del ICO entre 2006 y 2008 pagar sólo intereses durante 2009.

Mejoras para la banca

Para poner en práctica todas estas medidas es imprescindible que haya interés por parte de la banca. Por eso, el Gobierno decidió también aumentar el beneficio de las entidades que gestionen créditos del ICO. Dadas las «actuales condiciones de los mercados financieros», el Ejecutivo acordó incrementar 55 puntos básicos ese margen de intermediación en las líneas ICO-Pyme, ICO-Emprendedores, ICO-Crecimiento empresarial e ICO-Internacionalización. Una de las quejas que los banqueros transmitieron a José Luis Rodríguez Zapatero en su última reunión fue, precisamente, que consideraban escaso el diferencial que cobraban ahora por tramitar estos créditos.

Todas estas medidas forman parte de las propuestas formuladas por la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos, y fueron presentadas al Consejo de Ministros por el vicepresidente segundo, Pedro Solbes. La vicepresidenta primera, Teresa Fernández de la Vega, explicó al término de la reunión que su objetivo es «flexibilizar» el acceso al crédito por parte de las empresas y ciudadanos particulares. De la Vega pidió a los bancos y cajas un «esfuerzo adicional» y «responsabilidad» para atender esa demanda de crédito.

La número dos del Ejecutivo explicó que «estamos en un momento duro». «Entendemos las cautelas de los bancos, pero han de hacer esfuerzos para facilitar créditos», resaltó. Una vez más, pidió un «esfuerzo compartido», en el que también las entidades financieras deben poner su parte, para «mejorar el estado de nuestra economía». El Banco Central Europeo (BCE) prevé para el primer trimestre de 2009 un aflojamiento por parte de los bancos de las condiciones a la hora de otorgar créditos. En su última encuesta, realizada a partir de consultas a 112 entidades comerciales de la zona euro, constata que entre octubre y diciembre de 2008, tras el estallido de la crisis financiera, el sector planteó más problemas para conceder préstamos que antes.

Según el BCE, las entidades consultadas confirmaron el «endurecimiento» en el último tramo del año de sus procedimientos a la hora de prestar dinero, ya fuera para el consumo, para la compra de casas u otras inversiones. Contribuyeron a ello, detalló el organismo emisor, las malas expectativas económicas, el empeoramiento de las previsiones sobre el sector inmobiliario y una menor confianza en la solvencia de los consumidores.

La Federación Hipotecaria Europea recomendó a las autoridades de la UE y a los gobiernos de los estados miembros que garanticen la supervisión de las entidades financieras y la «transparencia» en los procesos de concesión de créditos. Este organismo, que aúna a las financieras que otorgan el 75% de las hipotecas en Europa, también propuso que las leyes nacionales y comunitarias aseguren que los candidatos a beneficiarse de un préstamo reciban la información «adecuada».

La OCDE hizo públicos sus indicadores sobre perspectivas de coyuntura económica, que cayeron 1,1 puntos en diciembre, hasta situarse en 92,9 puntos sobre una media de 100. En la Eurozona, el descenso fue de 0,9 puntos, y de 1,2 en el área del G-7. Descensos, según la OCDE «nunca vistos desde los años 70».