BRAD PITT ACTOR

«Cuando la fama te atrapa no hay escapatoria»

La estrella del cine americano protagoniza con la australiana Cate Blanchett 'El curioso caso de Benjamin Button', que aspira a 13 Oscar

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Tenga o no película, Brad Pitt siempre está de actualidad. Una década después de haber interpretado la brutal El club de la lucha, la estrella norteamericana se reencuentra con uno de sus mejores amigos y director favorito, David Fincher -con el que también rodó la célebre Seven- en El curioso caso de Benjamin Button. En esta historia, -la que más posibilidades tiene de arrasar en los Oscar al aspirar a 13 estatuillas doradas, entre ella la de mejor actor protagonista-, la pareja de Angelina Jolie encarna a un hombre que nace octogenario y, por un curioso caso del destino, muere joven. Pitt, que no aparenta su edad, 45 años, ha rodado esta producción que hoy llega a España como en casa porque, además de repetir con Fincher por tercera vez, ha coincidido con las actrices Cate Blanchett (Babel), Julia Ormond (Leyendas de pasión) y Tilda Swinton (Quemar después de leer).

-Vuelve a compartir fotogramas con Cate Blanchett.

-Cate mejora mi trabajo. Es una mujer maravillosa, una gran amiga y una actriz que lee las escenas como muy pocos intérpretes saben hacerlo. Tiene una elegancia innata. Me gustó mucho que hiciera de bailarina, un papel que le sienta como un guante.

-La película muestra cómo cada encuentro puede marcar de por vida a las personas.

-Es un tema que me fascina. Todos podemos impactar, dejar algún tipo de huella, lo que no significa que te limites a dejarte llevar y no luches por lo que quieres y deseas. Para mí se traduce en que aceptas lo inevitable de la vida. La gente va y viene, algunas personas desaparecen voluntariamente de tu lado y otras mueren. Todos vamos a morir, la cuestión es cómo lo afrontes. El filme explora la idea de que somos responsables de nuestras propias vidas, de nuestros éxitos y fracasos, y nadie más tiene la culpa o el mérito de lo que hacemos. No hay duda, el destino también tiene algo que ver, pero al final, tú eres el que decide qué camino tomar.

-Es su tercer trabajo con David Fincher.

-David tiene muy buen ojo para el cine, su manejo de la cámara, sus movimientos, son soberbios. Al final consigue obras de arte de factura muy cuidada. Es un director que me apasiona, tiene muchísimo talento. Llevábamos años intentando hacer algo juntos de nuevo, pero lo último que me esperaba era ser Benjamin Button. Ahora, con la perspectiva del tiempo, creo que ha sido el proyecto adecuado.

-Debió de pasar mucho tiempo en maquillaje para encarnar a un anciano decrépito.

-El maquillaje que me ponían cada día me hizo sentir muy vulnerable, pero fue una gran ayuda para meterme en el personaje.

Lo peor fue las más de cuatro horas diarias que pasé con el equipo de maquillaje. Era sólo el comienzo de las horas que tenía de rodaje por delante.

-Imagino que filmar en Nueva Orleans fue especial.

-He estado muy involucrado con esa ciudad desde que pasó el huracán Katrina. Por eso me encantó la idea de poder rodar allí y ayudar a mejorar en la medida de lo posible la maltrecha economía de la ciudad. Además, el ambiente de esa zona le ha dado un aire místico al filme que le viene muy bien.

-La mortalidad está muy presente en El curioso caso .

-Me hizo pensar mucho sobre la fragilidad de la vida, me hizo que me preguntara sobre cómo es mi vida. Estoy en la mitad de mi vida y no quiero perder el tiempo con tonterías y enfados. He aprendido a vivir feliz, no quiero desperdiciar mi existencia en malos rollos. El tiempo es muy valioso y voy a aprovechar el que me quede, no sé si será un día o veinte años.

Esperanza

-¿Cuál es el mensaje del filme?

-Que debemos ser más responsables de nuestras decisiones, y que hay que aceptar lo que el destino nos tiene preparado. No se ni siquiera si es un mensaje, si es positivo o negativo, es el espectador el que debe decidir lo que le transmite la película.

-Todo lo que hace se mira con lupa ¿se imaginó alguna vez viviendo bajo el microscopio de los medios de comunicación?

-Lo divertido de todo esto que no somos nosotros, lo que se ve no tiene nada que ver con nuestra vida diaria. Decidí ser actor sin saber que significaba la fama que, una vez que te atrapa, ya no te escapas. Me fascina el cine, adoro la interpretación. Lo que se vive alrededor de esta profesión puede aturdirte, pero no pienso cambiar mi vida por esa paranoia. En ciertas situaciones, me he sentido muy vulnerable, pero no voy a modificar mi existencia por uno, dos o tres tipos que no engan la cabeza en su sitio.

-¿Es de los que se lleva los personajes a casa?

-No. He oído muchas historias de actores que no son capaces de dejar el papel a un lado. Esto no es un problema para mí. Lo que más me cuesta es meterme en el papel.

-Muchos le ven ya con el Oscar en la mano.

-No sabría cómo medir la importancia de este premio. Para hacer esta película hemos andado un largo camino. Es un honor que me feliciten por lo que hemos hecho porque todos estamos muy orgullosos. Mi único pensamiento es disfrutar del momento. Hace diez años gané un Globo de Oro, no me ha preocupado conseguir otro. Doy lo mejor de mí a todos los personajes, trato de hacer bien mi trabajo.

-Obama está en la Casa Blanca ¿ve el futuro con optimismo?

-Creo que vivimos un momento en que podemos permitirnos esperanza, aunque hay que cambiar muchas cosas. La pobreza y el cambio climático siguen siendo una lacra a nivel mundial, pero confío más que nunca en nuestra capacidad para hacer algo positivo con estos dos grandes problemas de la humanidad.