ENCUENTRO. Miembros de la Diputación Permanente del Congreso, reunidos ayer. / CHEMA BARROSO
ESPAÑA

El Congreso examinará las causas de la huelga de jueces

El ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, y el presidente del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Dívar, comparecerán en el Congreso antes del 18 de febrero, fecha fijada por la mayoría de la magistratura para una jornada de protesta y por una minoría para ir a la huelga.

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La Comisión de Justicia del Congreso va a trabajar de lo lindo en los próximos días. El 3 de febrero, fijará la fecha para que acudan, primero, los representantes de las cuatro asociaciones judiciales para que expliquen sus reivindicaciones. A continuación, deberá decidir qué día es convocado Dívar y después Fernández Bermejo. Fuentes parlamentarias indicaron que ambos serán llamados la segunda semana de febrero.

El portavoz de Justicia del PP, Federico Trillo, denunció el «indecoroso» intento de los socialistas para que retirara su petición de comparecencia inmediata del ministro, y aunque su grupo sostiene que no comparte la huelga de los jueces, se mostró comprensivo con la medida por la falta de sensibilidad económica del Gobierno.

Los demás grupos rechazaron con crudeza la amenaza de la judicatura; el republicano Joan Ridao ironizó sobre el llamamiento de «las togas a las barricadas» y el diputado del PNV Emilio Olabarria recordó que la ley «prohíbe expresamente» a jueces y magistrados dirigir «felicitaciones o censuras» a los poderes públicos, y una huelga entra dentro «del epígrafe de censuras».

No fue la única derrota del PP. Todos los grupos rechazaron la comparecencia extraordinaria del presidente del Gobierno para hablar de la crisis, porque está citado el 10 de febrero, y del vicepresidente segundo, Pedro Solbes, quien también tiene ya cita.