El presidente de Estados Unidos, Barack Obama habla con la prensa junto al vicepresidente de EEUU, Joe Biden, en el Pentágono, Virginia (EEUU). /Efe
crisis económica mundial

La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprueba el plan de estímulo económico de Obama

El dinero de este paquete de medidas se destinará a crear empleos, ayudar a las familias, invertir en infraestructura nacional y asistir a los desempleados

WASHINGTON Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El nuevo presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha logrado su primera victoria importante al frente del país. La Cámara de Representantes ha aprobado, en medio de agrias disputas partidistas, el plan de estímulo de 825.000 millones de dólares propuesto por Obama para hacer frente a la peor crisis económica que sufre el país desde la Gran Depresión.

Con 244 votos a favor y 188 en contra, los legisladores han dado 'luz verde' a un conjunto de medidas entre las que se incluyen recortes tributarios para las familias y pequeñas empresas e inversiones en infraestructura y programas sociales en los próximos dos años. Ahora le toca el turno al Senado, que tiene previsto comenzar a debatir su versión del plan la próxima semana.

Los demócratas no lo han tenido fácil para sacar adelante estas medidas de rescate, ya que la minoría republicana ha presentado una alternativa que tachaba la propuesta de los demócratas de costosa e ineficaz para espolear la maltrecha economía, que no ha salido adelante. Tampoco conseguía la oposición que se aprobara otra alternativa presentada con anterioridad que pretendía modificar el texto del plan de rescate.

El plan que finalmente ha sido aprobado por cámara baja tiene el objetivo de crear o preservar entre tres y cuatro millones de empleos, realizar más inversiones en la infraestructura nacional y en proyectos energéticos, y prevé ayudas para los desempleados y para los gobiernos locales y estatales. En total, el proyecto de ley incluye poco más de 365.000 millones de dólares para la infraestructura nacional, 180.000 millones de dólares en ayudas para los desempleados y para otros programas sociales, y 275.000 millones en recortes tributarios que incluiría un crédito de 500 dólares para cada trabajador.

«No hay tiempo que perder»

El presidente Barack Obama, que esperaba un apoyo bipartidista al plan, ha insistido hoy en que en la economía atraviesa un momento "peligroso" y que "no hay tiempo que perder". Por eso se ha puesto a trabajar desde el primer momento. Una semana después de su investidura se desplazó al Capitolio para persuadir a sus detractores republicanos. Pese a esos intentos, los republicanos han presentado una alternativa con más recortes tributarios y que, a su juicio, costaría menos y duplicaría la creación de empleos.

Así, la votación de hoy ha reflejado la discordia entre ambos partidos sobre el alcance y contenido del plan. Durante un agitado debate, la mayoría de los demócratas ha insistido en que el plan creará empleos y fomentará el crecimiento económico, mientras los republicanos replicaban que los gastos fiscales son excesivos y que los recortes de impuestos no son suficientes.