CONFIANZA. El alcalde olvereño, Fernando Fernández, someterá su cargo al Pleno. / A. ROMERO.
SIERRA

El alcalde se somete hoy a una Cuestión de Confianza propiciada por los presupuestos

Si ésta prospera tendría que presentarse una Moción de Censura el próximo mes que sólo saldría adelante con un acuerdo entre el PSOE y el PP

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El alcalde de Olvera, Fernando Fernández (IU), se enfrentará hoy a una cuestión de confianza, vinculada a la aprobación de los presupuestos de 2009, que será planteada en el pleno de las 19.30 horas. Esta situación es fruto del rechazo por parte del Partido Socialista y el Partido Popular de los presupuestos preparados por el equipo de Gobierno para el año 2009.

Las cuentas municipales, que ascienden a 6,5 millones de euros, tratan de evitar la situación de presupuestos prorrogados que se da, desde el 2007. Izquierda Unida considera que ante la falta de apoyo por parte de la oposición, esta fórmula resulta la «más apropiada, dada la situación» para que en el municipio «se pueda llevar a cabo una gestión adecuada».

Para entender la situación del Gobierno de Izquierda Unida en la localidad olvereña, hay que tener en cuenta el resultado de las últimas elecciones y el posterior equipo de Gobierno que se formó. El PSOE fue la fuerza más votada y alcanzó los 6 concejales, IU obtuvo 4 y el PP consiguió 3. Esto propició que el entonces candidato de IU, Fernando Fernández, se proclamara alcalde, gracias al apoyo puntual del Partido Popular.

A pesar de que la agrupación de izquierda cuenta sólo con cuatro concejales nunca se conformó un gobierno IU-PP, sino que el apoyo fue puntual y de hecho no ha continuado durante la legislatura. Eso ha propiciado que cuatro concejales de IU, sobre un arco plenario de trece, hayan afrontado una situación en la que no pueden sacar adelante temas trascendentales, a menos que reciban el apoyo puntual del PP o el PSOE.

Una vez planteada la Cuestión de Confianza, el Pleno deberá apoyar hoy la gestión del alcalde izquierdista, en cuanto a lo que al Presupuesto se refiere, o por el contrario rechazarla. En caso de que sea aprobada el presupuesto saldría adelante, en lo que a la aprobación provisional se refiere. No obstante, si el apoyo no se produce, antes de un mes tendría que presentarse una Moción de Censura contra el alcalde, que propusiera un nuevo candidato a alcalde, que tendría que prosperar para que Fernández dejara de ser el regidor olvereño.

La baza que pretende jugar Izquierda Unida es que la única opción de que salga adelante esa Cuestión de Confianza es que el PSOE y el PP se alíen para nombrar a un nuevo alcalde, algo que parece complicado, además de por la diferencia ideológica que existe entre ambos, por las diferencias particulares que existen en el municipio serrano. De hecho, el apoyo del PP a IU perseguía que el socialista Francisco Párraga dejara de ser alcalde, ya que sin ese apoyo puntual el PSOE hubiera mantenido la Alcaldía, aunque fuera en minoría. En caso de no prosperar la Moción, el Presupuesto de 2009 obtendría el visto bueno del plazo ya que se entendería que el Pleno no retira la confianza al alcalde.

Ley Orgánica

Fernando Fernández someterá su cargo a la confianza del Pleno olvereño, de este modo, amparándose en la Ley Orgánica 8/1999, artículo 197, del 21 de abril. La misma permite que esta situación cuando se hace la Cuestión con respecto a presupuestos anuales, como es este caso, además de las ordenanzas fiscales, la aprobación de los planeamientos urbanísticos y el reglamento orgánico.