
Garzón decapita a la nueva Batasuna con la detención de ocho dirigentes 'abertzales'
Están acusados de reconstruir la coalición ilegal y de inventar partidos 'herederos' para las elecciones
Actualizado: GuardarAgentes de la Policía Nacional detuvieron la madrugada de ayer en las tres provincias vascas, por orden del juez Baltasar Garzón, a ocho dirigentes abertzales a los que el magistrado acusa de intentar resucitar Batasuna y de poner en marcha nuevos partidos satélites para las elecciones autonómicas del próximo 1 de marzo.
Entre los arrestados hay ex responsables de los ilegales PCTV, ANV o EH, pero también de Democracia Tres Millones (D3M) y Askatasuna, las dos marcas electorales con las que la izquierda independentista vasca pretende concurrir a los comicios.
Más de 300 funcionarios de las Brigadas de Información del País Vasco y Navarra y de las Unidades de Intervención y Policía Científica participaron en el operativo. El juez Garzón coordinó la redada desde Bilbao.
La operación comenzó de manera simultánea en las tres provincias vascas poco antes de las 2.30 horas de la madrugada.
En Vizcaya fueron arrestados: Iker Rodrigo, detenido en Getxo y apoderado de PCTV; Imanol Nieto, arrestado en Bilbao y antiguo empleado de PCTV; Elizabet Zubiaga, capturada en Lekeitio y dirigente de Batasuna; y Arantxa Urkaregi, apresada en Bilbao y habitual portavoz de ANV.
Poco después, Hodei Egaña, cabecilla de la ilegalizada Segi, fue arrestado en San Sebastián, y Agurtzane Salaberrieta en la localidad guipuzcoana de Usurbil. La captura de esta última, entienden los mandos de la policía, es «muy relevante» con vistas a la impugnación de Askatasuna, ya que esta mujer fue candidata por Guipúzcoa de esta formación en el año 2001.
La redada concluyó en Álava con la captura de otros dos destacados dirigentes de la izquierda abertzale: Amparo Lasheras, apresada en Vitoria, portavoz de D3M; e Iñaki Olalde, arrestado en Salvatierra, miembro de la Mesa Nacional de Batasuna.
Todos ellos están acusados de colaborar con organizaciones ilegalizadas. Los detenidos, según la Comisaría General de Información, trabajaban desde abril de 2008 para reactivar Batasuna tras los golpes policiales a la coalición en octubre de 2007 y febrero 2008, que terminaron con el encarcelamiento de 36 dirigentes del partido clandestino.
Mandos de la lucha antiterrorista destacaron que los seguimientos a los sospechosos han sido especialmente «laboriosos», ya que se han cuidado de participar en actos públicos o asambleas multitudinarias. El ministro Alfredo Pérez Rubalcaba destacó que la redada es fruto de un trabajo «minucioso, serio y riguroso» para atacar a aquellas personas que «apoyan y sirven» al «entramado» de ETA e «impedir que Batasuna se reproduzca».
Los agentes realizaron catorce registros en domicilios y otros cuatro en distintos locales, donde se incautaron de «abundante material informático y documentación relacionada con las actividades de EKIN-Batasuna, así como de otras organizaciones bajo su control», según Interior.
Registros
Los policías registraron la sede y un almacén de la plataforma ilegalizada en 2003 Herria Aurrera en Bilbao en presencia del juez Garzón. Allí encontraron abundante cartelería de D3M. También allanaron otro local de la ilegalizada Gasteiz Izan en Vitoria y una lonja de la plataforma lingüística AEK en el municipio guipuzcoano de Usurbil.
Además de los domicilios de todos los arrestados, los funcionarios irrumpieron en las casas particulares de otros dirigentes independentistas, que no fueron detenidos. Es el caso de las viviendas de los ex miembros de Batasuna Tasio Erkizia y José Ramón Etxeberria en Vizcaya, o de los domicilios en Navarra de los dirigentes de ANV Marifé Pueyo y Santiago Kiroga. Los agentes también inspeccionaron la casa de Vitoria de Fernando Antia, uno de los promotores de D3M, el domicilio en Álava de Aitor Bezares, dirigente de ANV, y en la localidad guipuzcoana de Fuenterrabía la vivienda de la concejal de ANV Miren Legorburu. Todos los detenidos fueron llevados a lo largo del viernes a Madrid, donde el juez Garzón tenía previsto interrogarles a partir de la tarde del domingo.