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Teófila es 'bulondra'

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La sociedad siempre se divide en dos: a unos les gusta el colacao y a otros el nesquick, unos prefieren la coca y otros la pepsi, unos son alondras, entendiendo por tales los que se levantan y del tirón se hacen una tabla de gimnasia sueca mientras que a las diez de la noche están hechos una piltrafa, y otros son búhos, incluyéndose aquí todos aquellos que amanecen arrugados como un estropajo pero por la noche están que se salen. Respecto de este tercer supuesto, aunque no es usual, se han detectado casos de personas que participan de ambas naturalezas y parece ser que uno de ellos se da en Cádiz, o al menos eso es lo que se deduce de la magnífica entrevista que Mabel Caballero le hizo a Teófila Martínez y que LA VOZ publicó el pasado domingo.

Sabíamos que la alcaldesa se despierta a las seis, justo a la misma hora que nos levantamos el resto, pero para hacer un pis y volvernos a acostar. Así cuando llegan las 9 de la mañana y la gente normal está dejando a los niños en el colegio, Teófila ya ha contestado los emails, leído la prensa en papel y digital, hecho una decena de llamadas y está saliendo de su primera reunión. A esa misma hora, la oposición, que es más búho que alondra, está comenzando con el café con tostadas y la lectura de la prensa local, que aquí forma parte de la dieta mediterránea. De modo que cuando a las 9.30 concluyen las abluciones propias de la primera colación, comienzan entonces el protocolo de abrir el correo, leer la prensa, etc. En el caso de Pérez Peralta la cosa aún se demora un poco más, porque a todo lo anterior debe añadir, la hora larga que tiene que dedicar a leer todos los blogs que lo ponen a parir y además realizar el agotador ejercicio cabalístico de descifrar quién se esconde detrás de cada nick.

La conclusión es que a la hora del pleno municipal, mientras que Teófila ya está sufriendo una bajada de azúcar por las horas transcurridas desde su desayuno, Román y compañía todavía tienen el regustillo al pan con aceite, que no favorece la oratoria. Por eso no es que Teófila grite, que a lo mejor grita, yo creo más bien que es una cuestión de que una y otros a esa hora tienen distinto tono vital, quizás si los plenos fueran por la tarde, el verbo suave y albertiano de Román tendría alguna oportunidad.

Pero claro, si además resulta que Teófila es capaz de aguantar hasta las dos de la mañana sin irse a la piltra, pues entonces la oposición lo tiene difícil para sorprenderla en una hora floja. Lo de Teófila, por lo que cuenta en la entrevista, parece que es de nacimiento, lo que me plantea la duda de si la persona bulondra nace o se hace. En general creo que se nace, pero en la política municipal, los alcaldes o se hacen o se juegan la reelección. Cierta ocasión el alcalde de un pueblo no muy grande me contó que asistía a unos 150 entierros al año, o sea todos lo del pueblo, con sus correspondientes velatorios, y como la gente suele morirse a la hora que le da la gana, tuvo que convertirse en bulondro para sobrellevarlo bien, porque si faltaba a alguno, se quedaba sin los votos de los deudos. Conclusión: si el PSOE está buscando candidato, que descarte a los que no sean bulondros.