La fortaleza del Barcelona frena a un Atlético que saca su casta y orgullo

El Atlético mejoró, incluso asustó al Barça durante algunos minutos, pero no intimidó lo suficiente como para doblegar a un equipo azulgrana al que le sale todo de cara. Los de Pep Guardiola remontaron con goles de Bojan y Gudjohnsen un partido que había roto Sinama y se clasificaron para los cuartos de final de la Copa del Rey, donde le espera un derbi ante el Espanyol.

El 1-3 de la ida pesó demasiado. El conjunto rojiblanco aprovechó las carencias del equipo B del Barça, con un Cáceres muy impreciso en defensa y un Pinto que no midió bien la salida en el gol de Sinama. La presión de los de Aguirre sirvió para mostrar que el Atlético tiene orgullo, pero la calidad es del Barça y se reflejó en el resultado final. Para colmo de sus males, el Atlético perdió a Agüero por lesión.

En los primeros 20 minutos, el Barça controló la situación con suficiencia. Tuvo Bojan una ocasión inmejorable cuando remató a las manos de Coupet, hasta que en la primera llegada del Atlético, Sinama Pongolle marcó.

El Barça tiene un agujero negro en la defensa de las jugadas a balón parado y Guardiola no parece dispuesto a cambiar de criterio, a pesar de que su equipo encajó el 0-1 de esta manera. Un centro desde la derecha de Simao y un remate de Sinama Pongolle adelantándose a la defensa y a Pinto, el noveno tanto que cede el Barça en una acción similar.

Le entraron las dudas al Barça con el tanto y el Atlético, por una vez, se sintió cómodo en el Camp Nou. La suerte para los locales es que apareció Sylvinho en una jugada de ataque y puso el balón en la cabeza de Bojan Krkic. El joven delantero sorprendió a la pareja de centrales y equilibró el partido, cinco minutos después. A 19 minutos para el final, cambio de protagonistas en la escena. Entró Messi y Agüero, aquejado de problemas físicos, fue sustituido por de las Cuevas y cuatro minutos después, en la mejor jugada del partido, el Barça decidió el enfrentamiento.