Vista de la entrada a la localidad guipuzcoana de Zegama, donde la Policía ha encontrado explosivos, detonadores y temporizadores en un escondite de la banda terrorista ETA. /Efe
lucha antiterrorista

La Policía localiza en Guipúzcoa un zulo de ETA con explosivos y busca otros dos

Detectado a raíz de la documentación desencriptada que fue intervenida en una operación contra la banda terrorista hace cuatro años en Francia

MADRID Actualizado: Guardar
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La Policía ha localizado un zulo con explosivos en la localidad guipuzcoana de Zegama. En su interior escondía quince kilos de titadine, además de cloratita y azufre. También se han descubierto cuatro fiambreras, detonadores y temporizadores, así como mapas, pelucas y varios mandos a distancia.

Los agentes están buscando otros dos escondites en la misma zona: el barrio de Olaran de Zegama, que está totalmente deshabitado. Este municipio del Goierri guipuzcoano, cercano al Puerto de Etxegarate, tiene 1.348 habitantes y cuenta con numerosos caseríos que suelen estar ocupados únicamente los fines de semana y las épocas de vacaciones.

El hallazgo del zulo ha sido posible gracias al análisis de la documentación incautada a José Segurola Querejeta, detenido junto a Miren Itxaso Saldúa Iriberri el 23 de marzo de 2005 en Francia cuando ejercía la tarea de 'lugarteniente' del jefe de los comandos en aquella época, Garikoitz Aspiazu, 'Txeroki', arrestado igualmente el 17 de noviembre de 2008, según han informado fuentes de la lucha antiterrorista. En estos documentos, aparecía un croquis con la situación de dos zulos en la localidad de Zegama, así como instrucciones para acceder a ellos.

Puestos de responsabilidad

La detención de Segurola Querejeta provocó la huida de un comando instalado en aquella época en la provincia de Guipúzcoa, quedando el zulo abandonado. Segurola habría actuado como responsable del comando en Francia y le habría suministrado el material explosivo hallado hoy.

Segurola Querejeta ya había ocupado puestos de responsabilidad en el 'aparato militar' con el antecesor de 'Txeroki' en el aparato militar, Gorka Palacios. Junto a Garikoitz Aspiazu entregó a dos 'legales' de ETA la furgoneta-bomba interceptada por la Guardia Civil en febrero de 2004 cuando los etarras se dirigían a Madrid para hacerla explotar.