¿El Mossad en Tarifa?

Aunque hasta Cádiz han llegado a salpicar conflictos diversos, como la utilización de las bases de Rota y de Gibraltar en diversas escaladas bélicas o las repercusiones de la guerra Irán-Irak en una misteriosa persecución naval que tuvo lugar en 1981, nadie parece confirmar que fuera cierto un asesinato selectivo atribuido al Mossad y que habría sido perpetrado en Tarifa meses después del atentado contra el equipo olímpico israelí perpetrado por Septiembre Negro durante las Olimpiadas de Munich de 1972. El caso fue recreado por Steven Spielberg en su película Munich, aunque el rodaje de la secuencia supuestamente gaditana se llevó a efecto en un chalet situado en la isla de Malta. Es cierto que el Mossad emprendió una serie de ejecuciones sumarísimas, guiado por una frase que se atribuye a Golda Meir: «Tienen que sentir que no sale gratis matar judíos». Lo que no está tan claro es que sea cierto todo lo que cuenta el periodista canadiense George Jonas en su libro «Venganza: la verdadera historia de un equipo antiterrorista israelí», que es el texto en el que se basó Spielberg para realizar el filme.