LAS PALABRAS DEL REY

El Rey pide la implicación de todos para conseguir «un alto el fuego» en Gaza

Don Juan Carlos reclama durante la celebración de la Pascua Militar «unidad y firmeza» para combatir la «execrable barbarie terrorista»

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El drama que desangra Gaza centró ayer todos los comentarios de la celebración de la Pascua Militar en el Palacio Real. El Rey, en su tradicional discurso anual de agradecimiento a las Fuerzas Armadas Españolas, reclamó ante los representantes del Gobierno y la cúpula militar el «despliegue de todos los esfuerzos diplomáticos» para lograr «un alto el fuego inmediato» en el territorio autónomo palestino invadido por Israel.

Su Majestad, acompañado de la Reina Sofía y los Príncipes de Asturias, suscribió el llamamiento en tal sentido realizado el lunes por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y pidió el esfuerzo de todos para «poner fin a la dramática situación de violencia y sufrimiento en la zona».

Don Juan Carlos, tras pasar revista a la Guardia Real en el patio de armas y hacer entrega de las condecoraciones, expresó la «honda preocupación» que le suscita la «grave crisis» que desde hace días vive Oriente Medio y aseguró que España está decidida a «contribuir activamente» al fin de la violencia en Palestina, «conforme a sus tradicionales vínculos de amistad y firme compromiso con la paz en la misión». Sus palabras se producen pocas horas antes de que el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbás, visite España dentro de su gira diplomática internacional para frenar el conflicto.

La ministra de Defensa, Carme Chacón, que precedió al Rey en el uso de la palabra en el Salón del Trono del Palacio Real, se sumó a la petición del fin inmediato de las hostilidades en Gaza. Chacón, situada junto a José Luis Rodríguez Zapatero y el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, destacó que «es esencial, y ahora más que nunca, que se abran los cauces necesarios para el diálogo y se sienten, de una vez por todas, las bases para una paz duradera».

El Rey y la ministra ensalzaron la «gran profesionalidad, dedicación y sacrificio» de los militares españoles en el extranjero, con motivo de la conmemoración del 20 aniversario del comienzo de la participación de las fuerzas armadas y la Guardia Civil en misiones de paz bajo mandato de la ONU. Ambos recordaron que en este tiempo más de 100.000 españoles y españolas han realizado un «abnegado trabajo» en 150 operaciones en 30 países de cuatro continentes.

Don Juan Carlos, ante oficiales de todos los cuerpos, animó «a seguir impulsando el papel solidario de España en la comunidad internacional y a colaborar activamente en la conservación de un orden internacional estable, basado en la convivencia pacífica, en los derechos humanos, y en el derecho internacional». El capitán general de todos los ejércitos envió «un saludo muy afectuoso» a los casi 3.000 militares que integran los contingentes que España tiene desplazados en Afganistán, Líbano, Bosnia, Kosovo, Chad y Somalia, y les agradeció «de corazón» su «valor, dedicación y sacrificio».

Carme Chacón se comprometió a mantener y aumentar en el futuro la colaboración militar española para asegurar la paz internacional e indicó que la conclusión de los actos de conmemoración de los 20 años de misiones internacionales será un homenaje a los 148 fallecidos en las operaciones. El Rey y la ministra recordaron de forma principal a los cinco militares fallecidos en 2008 en misiones de paz y a los dos asesinados por ETA, el brigada Luis Conde y el guardia civil José Manuel Piñuel.

Don Juan Carlos dedicó a todos «un sentido homenaje», pero quiso hacer «una mención especial a quienes fueron víctimas de la execrable barbarie terrorista, una lacra que debemos combatir con unidad, firmeza y determinación». Dijo que los siete fallecidos son «un ejemplo imborrable de vocación y generosidad al servicio de España».

Transformación

Su Majestad y la titular de Defensa también mostraron su «orgullo» al poder destacar que el marco legal de la Constitución y el trabajo realizado por treinta años de gobiernos democráticos han logrado una «profunda» transformación de los ejércitos españoles hasta lograr unas fuerzas armadas «modernas y eficaces, perfectamente integradas en su sociedad».

Carme Chacón recomendó a la sociedad, como la mejor fórmula para hacer frente a la recesión económica, el empleo de las «virtudes y cualidades que en estos años han atesorado nuestras fuerzas armadas», que condensó en: austeridad, abnegación, altruismo, unidad y compañerismo. La ministra anunció que, por efecto de esta crisis y de los incentivos introducidos por el Gobierno, las fuerzas armadas alcanzarán en 2009 los 86.000 efectivos, lo que supone un incremento del 23% de sus miembros en los últimos cuatro años.

La ministra también anunció que en unos días el Gobierno aprobará, después de 30 años, la reforma de las Reales Ordenanzas, el código de conducta de los militares. Esta modernización introducirá un capítulo destinado a reglar el comportamiento en las misiones de paz. Entre las exigencias a los contingentes españoles estarán el respeto a los derechos humanos, la ética y la cultura de los países con los que colaboran; la prohibición de ataques a no combatientes u objetivos civiles; y la exclusión de armas y tácticas que «repugnan a la conciencia», como las bombas de racimo o la tortura.