Fernando Alonso sufre un percance aéreo en Kenia pero se «encuentra bien»

Cuando iba a despegar, el avión que habitualmente utiliza Alonso para sus desplazamientos, propiedad de una empresa española, tocó con una de sus alas en uno de los edificios que sirven de hangar en el desvencijado aeropuerto y Alonso tuvo que retrasar hasta su vuelta hasta este lunes.

Aunque el diario italiano Corriere della Sera anunció que el avión alquilado había tenido una salida de pista en el aeropuerto, según fuentes cercanas al piloto asturiano Alonso y sus acompañantes ni siquiera se encontraban en el interior del aparato cuando se produjo el incidente.

El representante del bicampeón del mundo de Fórmula 1, Luis García Abad, restó importancia al suceso y lo calificó como un simple susto, confirmando que Alonso ya había tomado otro vuelo de regreso a España, en un avión privado del director general de Renault. El avión siniestrado sí sufrió la rotura de su ala derecha durante una maniobra previa al despegue.

Renault, a través de su jefa de prensa, aseguró que Alonso y el resto de ocupantes del jet sí estaban dentro del avión y «salieron por su propio pie» y que «Alonso se encuentra bien» una vez que el piloto decidió abortar el despegue, tras avanzar tres metros.

Este tipo de incidentes es habitual en los aeropuertos africanos, cuyas instalaciones dejan mucho que desear, especialmente los que no se encuentran en las capitales, ya que se utilizan hangares e instalaciones muy antiguas y en malas condiciones, tanto de señalización como de servicios auxiliares. El matrimonio Alonso y sus cuñados habían pasado las vacaciones navideñas en Malindi, donde habían sido invitados por Briatore, que dispone en esta localidad de un resort de lujo llamado Lion in the Sun.