ESTRELLA. Grabados de Picasso, en una exposición en París. / L. V.
Cultura

Los grabados eróticos de Picasso se expondrán por primera vez en Barcelona

Los grabados eróticos de Picasso, una amplia retrospectiva del artista catalán Joaquim Mir, los frescos de Sorolla de la Hispanic Society of America y el recorrido fotográfico de Robert Capa por las guerras del siglo XX destacan en el inicio de la temporada artística barcelonesa de 2009.

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El Museo Picasso de Barcelona exhibirá desde febrero hasta diciembre de este año una selección de grabados de temática erótica, realizados por Picasso entre 1964 y 1970, presentados en diálogo con estampas japonesas shunga, del siglo XIX, que se expondrán por primera vez en la Ciudad Condal. Si bien toda la obra de Picasso está impregnada de erotismo y sensualidad, se puede considerar que en dos períodos, el de sus inicios (1900-1908) y el del final (1964-1972) el artista se dedicó más intensamente a temas eróticos explícitos.

Si en el primer período realiza apuntes y dibujos, crónica irreverente y autobiográfica de su juventud, en los grabados de su última época se puede constatar una gran variedad de encuadres, de perspectivas, de técnicas de representación que confieren tal fuerza a las imágenes representadas que convierte al espectador en el voyeur al que está destinada la escena. Con esta muestra se renovará la presentación de las nuevas salas de grabado del museo, que abrieron a principios de 2008 con la propuesta Picasso, linograbador. Una gran retrospectiva del pintor Joaquim Mir, con un centenar de obras, abrirá la temporada 2009 de CaixaForum Barcelona, donde también se podrá contemplar una exposición sobre el arquitecto Richard Rogers (marzo-junio).

La exposición de Mir mostrará óleos, pasteles y dibujos, que denotan la evolución del pintor, desde un naturalismo primerizo hasta un estilo más personal próximo al impresionismo, al final. La exposición dedicada a Rogers, definido como el «último humanista», ilustrará su fascinación por el movimiento moderno, su concepción del edificio como una máquina y su apuesta siempre por una arquitectura clara y transparente. La exposición Visión de España, con los 14 paneles pintados por Sorolla sobre las diferentes realidades geográficas de España, abrirá la temporada del MNAC. Esta exposición ya se ha podido ver en Valencia.