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El Gobierno se plantea endurecer la jubilación parcial por su alto coste para la Seguridad Social
Entre enero y octubre esa figura ha supuesto un gasto adicional cercano a los 3.800 millones
Actualizado: GuardarCada jubilado parcial menor de 65 años cuesta a la Seguridad Social una media de 125.000 euros adicionales, según el director general de esa institución, Fidel Ferreras, quien lanza una llamada de atención a los miembros de la comisión parlamentaria del Pacto de Toledo para que «reflexionen sobre esta figura» que resulta gravosa para el sistema. A su juicio, es preciso tener en cuenta que el mecanismo de protección pública es de «reparto y solidario» o, lo que es lo mismo, «lo que cobran los unos lo pagan los otros».
Entre enero y octubre de 2008, esa figura, que permite a sus beneficiarios compatibilizar un empleo a tiempo parcial con una prestación de la Seguridad Social -siempre que se cree un contrato de relevo- ha supuesto un desembolso adicional cercano a 3.800 millones de euros.
El director general del Instituto Nacional de la Seguridad Social advierte de que todos los organismos internacionales alertan de la mayor esperanza de vida, lo que aumentará el coste del mantenimiento de las pensiones ordinarias. «Tenemos que ser conscientes de que vivimos más años para evitar grandes sustos en un futuro próximo debido a la evolución demográfica», expuso.
Ferreras explicó que la jubilación parcial se instauró en España en 1984 para paliar los efectos de la reconversión industrial y evitar «la jubilación mazazo» que suponía un retiro laboral brusco, con consecuencias sicológicas negativas.
En 2001 fue modificada entre el Gobierno, CEOE, Cepyme y CC OO y resultó más atractiva, pero el peso que suponía para el sistema planteó la conveniencia de nuevos cambios que se adoptaron en la pasada legislatura.
Los números
En 2003 hubo 10.867 jubilados parciales. En 2005, el secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado ya dio un toque de atención, consciente de que cada titular de esta prestación costaba 100.000 euros adicionales. En 2007, el número de acogidos se elevó a 28.982 y de enero a octubre de 2008, el total ya ascendía a 30.375. Los sectores que más recurren a su utilización son la automoción, las entidades financieras, las actividades industriales de limpieza, la enseñanza primaria y la administración local. El 70% de los jubilados parciales tiene 60 años de edad y sólo el 1,1%, 64 años. El importe de la prestación media en las nuevas altas es (octubre 2008) de 1.451,40 euros, cantidad que hay que multiplicar por 14 pagas, lo que da como resultado 20.319 euros.
A esa cantidad se añade la diferencia de cotización entre el retirado y la persona que le sustituye, con lo que el gasto llega a los 25.000 euros al año que multiplicado por cinco suponen 125.000 euros.
Requisitos de la parcial
En la actualidad, la jubilación parcial posibilita compatibilizar un retiro de la Seguridad Social y un puesto de trabajo a tiempo parcial. Los requisitos exigidos para acceder a ella son haber cumplido 61 años de edad o 60 si el interesado es mutualista por trabajar antes del 1 de enero de 1967, acreditar un período de antigüedad en la compañía de, al menos, seis años, y contar con 30 años de cotización. La jornada de trabajo se reducirá entre un 25 y un 75% o un 85% si el contrato del relevista es a tiempo completo e indefinido.
La empresa sólo paga la parte de jornada realizada por el trabajador y la Seguridad Social el resto. El contrato de relevo es imprescindible. Si la empresa se salta esta obligación o no la cumple de acuerdo con lo establecido en la ley será sancionada.
Para Ferreras, no es de recibo que «la Seguridad Social reconozca y pague una cuantía de prestación de jubilación a un trabajador retirado con 60 años igual que a otro que ha dejado su empleo con 65 años». «Habrá que preguntarse si esto es justo», concluyó.