Falta orientación

En estos tiempos en que todos los días somos testigos del nivel de violencia que hay a nuestro alrededor, y sabiendo que la raíz del problema y la solución están en la educación, ¿cómo es posible que aún no exista un servicio gratuito de apoyo a los padres en la educación de nuestros hijos? Es algo imprescindible, que una familia no puede costearse porque la economía doméstica no permite el gasto de un experto en psicología educativa. Los que tenemos hijos sabemos lo difícil que es educar, siempre con la incertidumbre sobre si lo hacemos bien o mal, y la impotencia que se siente en muchas ocasiones. Aunque ponemos todo nuestro empeño en hacerlo bien, no siempre obtenemos los resultados deseados. A menudo somos bombardeados con recomendaciones, más bien prohibiciones: no hay que castigar, jamás dar una bofetada, no alzar la voz... Pero nunca se nos ofrece la alternativa o la forma correcta de actuar en casos concretos; es decir, en lugar de castigar, lo que hay que hacer es... Lo que los padres necesitamos es alguien a quien acudir.