El Murcia aplaza su partido por una intoxicación alimentaria

El peligro que tienen estas fechas navideñas repletas de cenas de empresa, de amigos o familiares se resume en una palabra: indigestión. El pasado miércoles la plantilla del Murcia tenía una de esas citas. Se reunieron en una cena de Navidad en honor de su técnico recién destituido Javier Clemente, que deja al equipo en puestos de descenso a Segunda División B.

El resultado de la velada dejó un panorama tan desolador como la mala clasificación del conjunto pimentonero. Más de media docena de jugadores sufrieron una intoxicación alimenticia que ha provocado el aplazamiento del partido que debían disputar ayer en la Nueva Condomina frente al Celta de Vigo, en un choque correspondiente a la décimo séptima jornada de la categoría de plata.

Limitaciones

Los problemas gastrointestinales de media plantilla murciana, unido a los futbolistas sancionado y lesionados, impedían al nuevo técnico José Miguel Campos completar una lista de convocados. Tampoco favoreció en nada la normativa que limita el número de jugadores canteranos que pueden engrosar las filas del primer equipo.

La Federación Española de Fútbol comunicó a ambas partes su decisión de aplazar el encuentro, que se disputará en una fecha aún por determinar.