La provincia desaprovechó la época de bonanza y sigue a la cola en economía
El PIB de Cádiz creció a un ritmo anual del 3,24% entre los años 2000 y 2007 El poder de compra de las familias es el segundo más débil de todo el país
Actualizado: GuardarLa realidad económica de la provincia de Cádiz es la perfecta antítesis del matrimonio: ni en lo bueno ni en lo malo. Ni siquiera en el periodo de mayor crecimiento que ha tenido España (y también esta zona) en mucho tiempo (el comprendido entre 2003 y 2007), se consiguió arañar distancias. Incluso se podría aseverar todo lo contrario, que las familias gaditanas son las que peor capacidad de compra tienen en todo el país, sólo superadas (en lo malo) por Guadalajara. Si se entiende que la media española es 100, Cádiz se sitúa en una tasa del 76,8.
Las estimaciones fueron realizadas ayer por Funcas, la fundación de estudios económicos de las cajas de ahorros, dentro de su Balance Regional y Provincial correspondiente a 2007. En su análisis de la evolución desde que comenzó esta década, la provincia sale bastante mal parada en términos de riqueza de los hogares y no tanto en los términos absolutos de crecimiento.
Al segundo grupo (al de las noticias relativamente buenas) pertenece, por ejemplo, el comportamiento del Producto Interior Bruto entre 2000 y el año pasado. La provincia avanzó a una media del 3,24% anual en todo ese periodo, lo que la sitúa con el noveno mejor registro del Estado (el dato es sólo a medias bueno, porque hablamos que esa posición es la que debería corresponderle, provincia abajo o arriba, por población). Pero algo es algo.
Un poco más abajo (incluso por detrás de su posición teórica en función de los habitantes) se coloca en el porcentaje de variación en creación de empleo en estos ocho años: Cádiz consiguió generar un 18,58% más de puestos de trabajo, cifra que la manda al décimo tercer puesto. El consuelo hay que buscarlo en que está en la parte alta de la media nacional.
Las búsquedas se complican cuando se baja a la tasa de paro (la peor en la península) o al impacto del crecimiento global sobre cada ciudadano. Ya el año pasado, los resultados de Funcas reflejaron que la economía crecía a mejor velocidad de lo que luego se trasladaba a la riqueza familiar. El estudio recién presentado calca la conclusión.
El consumo familiar de los gaditanos ascendió en 2007 a 14.147 millones de euros, una cifra en la tierra de nadie que delimitan los 10.800 de Granada (la siguiente en el escalafón inferior) y los 19.700 de Málaga (la anterior). La desproporción entre población y capacidad adquisitiva deja a la provincia a la cola del índice relativo de poder de compra (ver gráfico).
Aunque si existe un dato que demuestra el abismo entre macro y microeconomía es el de la producción que es capaz de crear cada territorio (la potencia de las empresas, que generan y generan pero no dejan sus resultados aquí). En 2007, este valor se fue a los casi 44.000 millones: el doble del PIB provincial y sólo a 6.000 millones de lo que obtuvo Málaga o por encima de todo Asturias, Santa Cruz de Tenerife o Las Palmas.